Ocho meses han pasado, Flor ahora es una dama de sociedad, ella ya tenía el refinamiento, pero no la apariencia por causa de la enfermedad, ahora se ve una mujer hermosa, la madre de Bruno llega seguido a tomar el té con ella y platicar de cosas de mujeres. Bruno ha decidido llevarse a Rosalinda a su oficina. —¡Lista! —Si, Me despido, espero verlas cuando regrese. —Vayan con bien. —Solo vamos a la oficina. —No sé por qué te la llevas, ahora que estamos juntas, aconsejaríamos muy bien a mi nuera. —Madre, volveremos temprano. ¡Vámonos, si no, nunca te saco de aquí! —Le susurra para que se despida rápido. Ambos salen de la casa, las dos mujeres no pierden detalles, en sus adentros ellas se sienten feliz por ver como ellos se aman y se complementan. Ella se sube al auto y él después, s

