Una verdadera chica mala

Capítulo 3

Sentí algo baboso en la cara y abrí un ojo para ver que era, tenía a Dobby sobre mi cama lamiéndome la mejilla, Dobby era mi hermoso pastor alemán. 

-Dobby- Me reí y lo acaricié detrás de sus orejas, miré la hora y abrí los ojos. - Es tarde, tengo que cambiarme- Me levanté como un rayo de la cama. 

Me duche rápido y sequé mi cabello con la secadora, lo deje con las ondas naturales porque no tenía tiempo de hacer nada. Entré a mi armario y tomé unos leggins negros y una camiseta amarilla de 5SOS y revisé mis botas con plataformas. 

Me quedé con las negras con tachas y no me molesté en maquillarme, un par de collares mi pulsera de la amistad que me dio All, ella tiene una igual, listo. Agarré mi mochila y bajé a la cocina. 

Josh estaba devorándose todas las tostadas, lo empujé para poder agarrar algunas. 

-No hay tiempo tenemos que irnos- Me avisó Josh. 

-Pero mi desayuno... 

-No hay tiempo, vamos- Agarre mis tostadas y salí de mi casa, fui rápido asta mi bebé, donde Josh ya se había subido y arranqué. Iba manejando con una mano mientras que con la otra comía mi tostada. 

-Dios mujer, nos vas a matar, maneja bien- No pude evitar reírme Josh se agarraba al asiento con las dos manos. 

-Estoy manejando bien, pero tengo que darme prisa para pasar a buscar a los chicos- Di un giro brusco a la derecha y paré frente a la casa de All.- ¡Alice! ¡Liam! - Toqué el claxon y ellos salieron de la casa corriendo. 

-Vamos- All tiró a Josh del asiento de copiloto y se sentó allí, cuando Josh se sentó atrás encendí el auto y subí la velocidad- Te cambio una tostada por un cupcake de chocolate. 

-Claro- Dije obvia. - No puedo creer que no te guste el chocolate, es la gloria- Le arranqué el cupcake de la mano y le di mi tostada. 

-Solo no me gusta y acelera que no llegamos. 

- ¡No! - Vi por el retrovisor a los chicos con cara de espantados, rodé los ojos y aceleré más mientras me terminaba mi cupcake de chocolate. Giré a la izquierda y llegué al estacionamiento de la escuela, casi mato a una chica rubia, pero por lo menos llegamos. - ¡Están locas! 

-Cállense- Dijimos las dos al unísono. - Bueno tenemos que apurarnos le dije a Anne que la acompañaríamos a dirección por sus horarios- Dice All. Después de lo de la fiesta seguimos hablando con Anne, era una chica divertida, nos dijo que vendría a este colegio por lo que nos alegramos bastante. 

-Claro vamos- Bajamos del jeep y entramos al instituto, en la entrada nos esperaba Anne junto con su hermano. 

-Hola chicas- Estaba sonriendo, pero se le notaba el nerviosismo. 

-Hola, tranquila no va a ser tan malo- La tranquilizó All. - Ahora vamos por sus horarios- El hermano de Anne no hablo, pero nos siguió mientras íbamos por el pasillo. Todos nos miraban, pero ya estaba acostumbrada a eso así que no le di importancia. 

- ¿Por qué todos nos miran? - Dice Anne en voz baja. 

-Nunca lo supe y nunca lo sabré- Respondo tranquila. - Tú solo ignóralos, has como que no están ahí. 

-Está bien... - Llegamos a dirección y al tocar la puerta el director Marshall nos dejó pasar. 

- ¿Qué hiciste ahora Mia? - Suspira. - Ni siquiera comenzó el día... 

-Esta vez no hice nada Dave, sólo acompaño a una amiga y su hermano a buscar los horarios. 

-Está bien, trata de no terminar en mi oficina hoy ¿sí? 

-Trataré- Él sonríe cansado y les da los horarios a los chicos. - Adiós Dave. 

-Adiós Mia- Salimos del despacho del director y los chicos miraron sus horarios. 

- ¿Qué clase tienen? - Preguntó All. 

-Historia- Dijo Anne. 

-Yo también ¿tú Alex? - El morocho miró el papel. 

-Matemática- Dijo suspirando, por lo menos no era la única que odiaba las matemáticas. 

-Yo también la tengo ¿vamos? - Él asiente y vamos hasta la clase. 

-Vamos tarde- Dice de repente Alex mirando la puerta cerrada. 

-Ya lo sé, pero hay que entrar- Antes de que diga algo abro la puerta sin llamar y el profesor al verme sonríe. 

-Tendría que saber que eras tú Spirito, el día que llegues a tiempo me dará un paro cardíaco- El profesor Scott Davies, tenía unos veinticinco años y estaba para chuparse los dedos, ya se había acostumbrado a mis llegadas tardes. 

-No diga eso, puede ser que algún día pase- Él solo rio negando con la cabeza. - Pero esta vez tengo una razón, acompañe a un alumno a buscar sus horarios- Dije sonriendo inocentemente. 

-Siéntense los dos- Fui a mi asiento habitual en el fondo y para mi sorpresa Alex se sentó a mi lado. - Bueno sigamos con la clase... 

No presté atención a lo que decía, solo me puse mis audífonos y dejé que la voz de Andy Biersack me relajara, comencé a dibujar en mi libreta hasta que siento que me tocan el hombro. Levanto la mirada y ahí está el profesor Scott mirándome divertido. 

- ¿Se puede saber porque está escuchando música en mi clase Spirito? - Trató de sonar duro pero no lo logró, lo conocía demasiado. - A la sala de profesores ahora- Reprimí una risa y tomé mis cosas para salir de clase, el profe me seguía detrás, cuando entramos a la sala de profesores vacía y solté una carcajada. 

- ¿No tenías una mejor excusa para verme Scott? - Arqueé una ceja, a lo que él rio. 

-La verdad que no- Se acercó más a mí. - Hace tiempo que no nos vemos- Susurra. 

-Ese es el punto de las vacaciones, no tener clase- Digo divertida, me acerco más y agarro su camisa. - Aunque no me molestarían unas clases particulares- Scott me sonríe divertido. 

-Y a mí no me molestaría dártelas- Puso sus labios sobre los míos y por dios, que bien besaba. El timbre nos hizo separarnos. - ¿Nos vemos después de clase? 

- ¿Tienes clase ahora? - Digo contra sus labios. 

-No, terminé por hoy, solo tenía tu clase. 

-Bueno entonces vamos, no pienso entrar a historia- Antes de que pueda decir algo agarro su mano y ambos salimos de la sala de profesores para salir por la puerta trasera, lo guío hasta mi jeep. 

- ¿Mi casa? - Dice subiendo al jeep. Asiento y él sonríe, le envió un mensaje rápido a All y acelero hasta la casa de Scott. 

Narra All. 

La clase de historia se pasa demasiado lenta y casi lloro cuando toca el timbre para ir a la cafetería. Busco a los chicos y me siento en la mesa de siempre, Anne fue a buscar a su hermano por lo que solo estamos Josh, Liam, Sean, Chase y yo. 

- ¿Dónde está Mia? - Me pregunta Chase. 

-No tengo ide... - El sonido de mi móvil me interrumpe. 

Mia: Emergencia Scott, llego para la última clase

Yo: Está bien, nos vemos después;) usen protección, no quiero ser tía tan joven

- ¿Otra vez con el vejestorio? - Dice Chase a mi lado por lo que lo empujo. 

-No te metas en conversaciones ajenas Chase- Él rueda los ojos. - Además tienes que admitir que el "vejestorio" está buenísimo. 

-Cállate, esto sólo le traerá problemas y lo sabes. 

-Y tú sabes cómo es Mia, déjala en paz- Ruedo los ojos y me concentro en mi comida. Anne llega con su hermano y otro chico, pero no tengo ganas de hacer presentaciones por lo que se lo dejo a mi hermano y a Josh. 

-All, ¿dónde está mi hermana? - Fijo mi vista en Josh. 

-Está... - Le doy un codazo a Chase. 

-Está hablando con el profesor de matemáticas- No era del todo mentira, solo que lo que menos están haciendo es habar. Josh me mira desconfiado, sé que no se lo ha tragado por lo que cambio de tema. - ¿Irás hoy a casa? 

-Eh...Si ¿por qué? - Dice despacio y mi hermano nos mira a ambos. 

-Solo curiosidad- Digo rápido, antes de que puedan decir algo agarro mi bolso y salgo de la cafetería para ir al baño de chicas. 

No sé qué me pasa últimamente, cada vez que veo a Josh me pongo nerviosa. Es algo totalmente loco porque lo conozco de toda la vida, pero todo tenía que cambiar el maldito día de la fiesta. 

Era el cumpleaños de Liam y él quiso hacer una gran fiesta en la casa, todos tomamos mucho, esa noche perdí mi virginidad con Josh y lo único que me dijo y cito textualmente fue: "lo siento, estaba borracho". Nunca sentí tanta ira y vergüenza en mi vida, no le hable por un mes hasta que me pidió perdón, pero las cosas siguen un poco tensas. 

Cuando se lo conté a Mia solo me contuvo y no le habló a Josh por un mes y medio, es la mejor amiga que puedo tener. Cuando lo perdonó también le dio una patada en su amiguito y le dijo que no se me acercara. 

Hablando de Roma, espero que no se meta en más líos por estar con Scott...