Pasó toda la noche con ella, Ambos se quedaron dormidos, no pudieron hablar casi nada. Él se levantó temprano, se bañó y se fue, le dejó una nota a ella escrita en la mesa de que serviría para la empresa porque tenía asuntos que atender. Cuando llegó a la empresa, encontró a su primo, sentado en su escritorio. — Hola, Evan. — ¿Trevor, cuando llegaste? — Se abrazaron y se pusieron al día con las cosas que tenía pendientes. Trevor le explicó cómo estaba el asunto con las empresas, le dijo que autenticará lo más pronto posible ese documento. Evan está por retirarse para hacer lo que su primo le acaba de decir. Cuando Trevor sintió que las vibras no era igual. — ¿Qué es lo que está pasando? — Nada, primo, después te cuento. — ¿Por qué? ¿Será que presiento que algo pasó en mi ausenc

