En el momento que se acercó me preguntó si podía sentarse a mi lado y le dije sí, se presentó diciendo;
-Mí nombre es Jade
•Pensé “es un lindo nombre” y me presenté:
-Yo soy Sofía
Jade: Hace cuánto te mudaste a la ciudad?
Sofía: Apenas dos días
Jade: Pues enhorabuena, te puedo ayudar y llevarte a conocer la ciudad—al decirlo se le dibujó una gran sonrisa
Sofía: Sí, claro
Luego de eso se quedó sentada a mi lado hasta el receso, cuando salimos nos sentamos en una mesa que estaba vacía, luego empecé a comer una manzana que traía, y en esos momentos sentí un fuerte olor a mis espaldas.
• Conozco ese olor, es el mismo de la chaqueta del chico de la otra noche.
Miré hacia atrás y ahí estaba él, el mismo hombre alto y fuerte con el que me había topado la noche anterior, él no me reconoció y entonces me pregunté;
•Si no me reconoce que hace detrás de mí?
Y en ese momento Jade le dice;
Jade: Qué quieres hermano?
•No es posible, me dije por dentro, mi nueva amiga es la hermana de este dios griego, qué pequeño es el mundo.
Jade realmente es linda, pero jamás me pasaría por la cabeza que es su hermana.
Jef: Solo pasaba y decidí entrar a ver cómo iba todo, por cierto, no presentarás a tu amiga?
Este hombre sí que tenía mala memoria o simplemente yo era insignificante.
Jade: Sofía, él es mi hermano Jeferson
Hermano, ella es mi amiga Sofía.
Nos saludamos dándonos las manos
Jef: Es todo un placer para mí conocerte Sofía.
Sofía: I..igualmente—Apenas empiezo y ya lo eché a perder
Sentí que mis piernas temblaron, no pude decir más nada.
Luego de eso soltó mi mano y siguió su camino, yo quedé un poquito nerviosa pero pasó rápidamente.