Me despierto con el cuerpo adolorido por culpa de Harry, anoche me lo hizo muy rudo y de verdad que me dolió todo el cuerpo por las diferentes posiciones que me puso y por las veces en las que entró sin tener cuidado. Entro en el baño y veo mi reflejo en el espejo, no me creo lo que me muestra pero es real lo que hay en él, mis pechos tienen marcas de mordidas al igual que mi cuello, mis caderas tienen marcas de los dedos de Harry, me doy la vuelta para ver ligeras líneas rojas donde la sangre se marcó por los azotes que Harry me dio mientras me penetraba. Incluso mis muñecas tienen marcas de la fuerza que ejerció en ellas para que no me moviera. ¿Duele? No. ¿Molesta? No. ¿Incómoda? Si. Salgo del baño para ir a ver a Harry que se mantiene serio en la cama mientras busca algo en la

