Seduciendo Al Ganster

Capitulo 2

Kirill.-

- ¡Señor le juro por lo que mas quiera! Yo no les dije nada, yo nunca lo traición… -Se escuchó un fuerte estruendo y el hombre dejó de hablar, observo mi camisa y mi traje manchados con la sangre de esta rata-

- Si hay algo que mas detesto aparte de los traidores son los que me mienten descaradamente en la cara ¡Saquen a esta basura de aquí, de inmediato! Y espero un reporte de lo que dijo esta rata en cinco minutos -Salgo de la celda en el camino voy deshaciéndome del saco y la camisa, me encuentro a otro de mis hombres y se lo tiro en la cara- quema esto junto a esa basura -El hombre asiente sin mirarme fijamente, como él todos los que están bajo mi mando no se atreven a verme fijo, me han creado la fama de con solo verme los peores miedos y temores de todos salen a la luz, dicen que mi mirada es la del mismísimo diablo, otros comentan que soy su reencarnación y es por eso que me llaman el diablo de Bratvá y mi fama me precede-

(…)

- Timur ¿Qué me tienes?

- Como sospechabas lo dijo todo sobre la operación Valkiria, en este momento la interpol y el FBI deben estar llegando al puerto de Panamá creyendo que el cargamento llegará allí, los hombres esperan tus órdenes

- No, por ahora no quiero un baño de sangre, no nos vendría bien cargar con la muerte de otro policía, pero me gustaría ver sus rostros cuando noten que volvieron a gastar una fortuna de los recursos del estado en una persecución que no va a servir de nada -Sonrío con satisfacción- Bien voy a celebrar al antro quiero quitar un poco el estrés que me dejo la rata esa, no quiero que esto vuelva a pasar Timur, para eso te pago y muy bien en mis filas no quiero traidores y hay que ser más duros para hacérselos entender pues hazlo

- Algo tuvieron que ofrecerle para que hablara ese idiota, nuestro informante en el FBI está buscando la información, pero con cada operación fallida se vuelven más herméticos

- Vamos a quedarnos quietos por un tiempo, seguiremos con nuestros negocios, solo con los hombres de mas confianza sin contratar mas personal y a nuestros informantes recuérdales que tienen mucho que perder si me fallan -El hombre asintió y como todos bajo la mirada, Timur es de toda mi confianza, mi segundo al mando y también es un amigo, el único realmente, en esta profesión no hay amigos por dos razones, una te pueden traicionar fácilmente queriendo el poder y dos se convierten en una debilidad si la competencia o tus enemigos se enteran de que alguien te importa lo convierten en tu talón de Aquiles, como lo que le sucedió a mi padre-

Se enamoró de mi madre y creyendo que podría tenerlo todo y ser feliz en este mundo se confió aun con toda la protección que le dio no pudo protegerla y tuve que criarme al lado de la familia de Timur es el hijo de una sirvienta, para que no me utilizaran como lo hicieron con mi madre.

Dos años después que mi padre se caso mi madre se embarazó y tuvo que pasar su embarazo encerrada escondida del mundo exterior, solo con una joven sirvienta la madre Timur a la que mi padre le ordenó hacerse pasar por embarazada, cuando nací se les hizo creer a todos que yo era hijo de esa mujer, no pude compartir con mi madre y a mis cuatro años fue asesinada en una emboscada hecha por la mafia italiana. Tengo vagos recuerdos de como era, si compartí con ella mas de seis veces en ese tiempo fue mucho mi padre no dejaba que se me acercara por temor a que descubrieran nuestro parentesco.

Está demás decir que tampoco recibí cariño de mi padre o un acercamiento de niño solo recibí el amor de Timur y su madre, pero también fueron apartados de mi a corta edad, mi padre al ver el cariño de esa mujer hacia a mi la envío lejos junto a Timur y a mi me encerró en un internado en Bélgica con una identidad falsa, hasta que fue traicionado por el que él creía era uno de los mas leales queriendo el poder, fue cuando Timur apareció me sacó del internado y me preparó para ocupar el puesto de mi padre no sin antes acabar su verdugo.

Estaba tan lleno de ira que le di una de las peores torturas y de ahí mi apodo el diablo de Bratvá.

Hope.-

- Hope no quiero una esposa trabajando como agente, cuando nos casemos no quiero que trabajes en el campo ese no es el matrimonio que espero

- Cuando me inscribí lo aceptaste ¿Por qué ahora ese cambio Greg? -Observo como se rasca la cabeza, exasperado-

- ¿Tienes idea de las burlas que he tenido con mi familia, mis amigos? -Lo miro confundida-

- No entiendo porque, es una carrera como cualquier otra

- Es una profesión de hombres Hope y si a eso le sumas que me tendré que quedar aquí mientras tú haces tus operativos al lado de otros hombres ¿Cómo me deja ver?

- ¿No confías en mí? Después de tres años, ¿Para qué me pediste matrimonio entonces?

- Pensé que todo esto era un capricho y mas con lo que le sucedió a tu hermano -Me quedé en silencio sorprendida y dolida, la muerte de mi hermano Henry hace más de dos años orquestada por la mafia rusa dejó una huella, me preparé para ser agente del FBI con la intención de entrar en el operativo para atrapar a su líder y vengar la muerte de mi hermano-

- Pues no es un capricho, te amo y deseo casarme contigo Greg, pero si no me apoyas, no hay nada mas de que hablar, piénsalo porque si me conoces tan bien como dices, aunque claramente no, no suelo ser de las que quitan el dedo del renglón tan fácilmente -Me levanto de la mesa tomando mi abrigo y me cartera-

- No te atrevas a dejarme solo, vamos a cenar

- Lo siento, se me quitó el apetito -Me aparte de la mesa dejándolo con la atenta mirada de los demás comensales, no sé en que momento Greg cambió tanto y se volvió un machista, de haber sabido ese detalle en un principio ni me habría fijado en él, este no es el hombre que quiero para mi vida, observo el precioso anillo de diamantes situado en mi dedo, en su momento fui la mujer mas feliz a su lado-

Como toda mujer anhelaba la llegada de mi príncipe azul, me ilusionaba la idea del amor, de conseguir el hombre perfecto para mí, recuerdo que en esa cafetería estaba Greg ambos con el mismo gusto en cafés una late de vainilla con leche de almendras y un poco de caramelo, ¿Qué probabilidades había? Lo vi como una señal y coqueteé con él, intercambiamos números y desde ahí estuvimos juntos.

Hasta que mi vida se torno gris por la muerte de mi hermano Henry, un agente del FBI el preferido de mi padre, estaba mas orgulloso de él que de mí. Cuando Henry murió mi padre se sumergió en depresión total, solo duró dos meses cuando le dio un infarto quedando solo mi madre y yo.

Decidí ingresar a la academia de policía con la única intención de convertirme en agente especial, me esforcé mucho para lograrlo y busco la oportunidad para entrar en el cuerpo especial que lleva años tratando de desmantelar la organización rusa la Bratvá que ahora está liderada por el desgraciado de Kirill Volkov.