Seduciendo Al Ganster

Capitulo 4

Moscú. -

No puedo negar que me muero de nervios además de ser mi primera misión no es una cualquiera es estar cara a cara con el hombre que le quitó la vida a mi hermano.

- ¿Nerviosa? Pregunto expectante la agente García

- Un poco, no es por la misión en sí, es porque no sé si sabre disimular mi desdén cuando intente seducirme

- Si crees que no puedes hacerlo, solo llámame -Asentí- estaré en contacto apenas pueda, no confíes en nadie

- Está bien, estaremos en contacto -Sali del baño del aeropuerto acababa de llegar a Moscú, sentía la mirada de todos sobre mí, no era un secreto que Rusia protegía a Volkov por eso era tan difícil agarrarlo y eso sumando a que el desgraciado se sabe cuidar bien la espalda no hay nada que lo incrimine sabemos que es un asesino, sabemos que trafica armas, pero en papel es un fantasma, pero voy con toda la intención de ponerlo de rodillas ante mi y que me suplique clemencia, tengo un plan muy diferente al de mis jefes, haré todo a mi manera-

Esto al menos me distraería de mi fracaso amoroso, Greg resultó ser un miserable patán, a mi mente vienen las imágenes de esa noche

FLASHBACK. –

Aunque Greg últimamente no se ha portado bien sigue siendo mi prometido y debo mantenerlo al tanto, obviamente sé qué opinión me dará sobre esta misión, pero si no comprende la razón por la que lo voy a hacer entonces no habrá mas nada que discutir.

Llego a su apartamento y entró noto que las luces están tenues cuando doy un paso escucho la voz de una mujer que proviene de la parte superior, sigo sin hacer ruido, observo que en la mesa hay dos platos y dos copas de vino, ¡esto no puede ser! subí con cautela las escaleras y comencé a escuchar risas y sonidos parecidos a besos…

- ¡Bravo Greg! -Ambos se sobresaltaron cubriéndose con la manta su desnudez-

- Hope, mi amor no es lo parece yo…

- ¡CIERRA TU PUTA BOCA! No puedo creer que haya sido tan estúpida -Me quito el anillo y se lo lanzo a la cara- y pensar que pretendía dejar mi carrera por ti

- Mi amor espera déjame explicarte por favor -Suplicaba mientras se colocaba los pantalones-

- ¡NO QUIERO QUE ME EXPLIQUES NADA! No vuelvas a buscarme, ni a llamarme esto ¡SE ACABÓ! -Sali corriendo de allí furiosa, miserable y quiso hacerme sentir mal cuando él estaba poniéndome el cuerno-

En el fondo me duele, si estaba enamorada de él, hasta hace unos meses me sentía bien con su compañía hasta que mostró su faceta de machista Emma tenía razón él siempre fue así solo que yo nunca lo noté.

Tomé el teléfono nuevo y disqué el numero de la agente García.

- No tengo nada que pensar, cuenten conmigo…

FIN DEL FLASHBACK. –

Desde ese día lo único que hice fue prepararme para mi misión, hice mis propias investigaciones sobre Kirill Volkov, pero es muy poco lo que aparece en internet y preguntar por él es como colocarte una bala tu mismo en la cien.

El jefe y la agente tenían razón la única manera de infiltrarse era seduciéndolo, aunque no sé que tan buena sea para esa tarea, mi prometido de tres años me fue infiel y quien sabe con cuantas.

Llegué al hotel para salir esta noche, ni nombre sería igual Hope, pero con el apellido de mi madre Bennet soy una joven y solitaria heredera que le gusta la diversión y busca hacer negocios para incrementar su fortuna.

(…)

No dejaba de mirarme al espejo yo no suelo vestir así, pero tengo que llamar su atención, no será fácil, pero es lo que toca para esto te preparaste Hope, me saca de mis pensamientos mi celular

- ¿Estás lista?

- Así es, ya voy a salir, quiero divertirme un rato y conocer las noches de Moscú deja de vigilarme -Colgué la llamada, teníamos que hacer esto el diablo de Bratvá estaba al tanto de quien entraba y quien salía de la ciudad- Bueno aquí voy

El equipo y yo sabíamos que Kirill era visto continuamente en un bar llamado el lirio de plata, según era de su propiedad, pero figuraba a nombre de otra persona, más era él quien daba las órdenes.

Llegó al lugar, no tiene la pinta que esperaba se ve muy lujoso a pesar de todo le pago al taxista que no dejaba de verme en todo el camino. Y entro en mi papel.

- ¿Puedo pasar? -Le hablo al guardia que me mira de arriba abajo y me cercioro poner una de mis piernas delante-

- No eres de por aquí

- No, soy una turista y la verdad me quiero divertir mucho -Comienzo a menear mi cabello dejando mi cuello al descubierto, en eso noto que pone su mano en su oído asiente y rápidamente me cede el paso-

- Que te diviertas -Le guiño el ojo-

- Muchas gracias guapo -Me adentre en el antro y observe a detalle, me dirigí al bar-

- Hola hermosura, ¿Qué te ofrezco?

- Que te parece el mejor trajo que represente a esta hermosa ciudad -Le ofrezco una gran sonrisa al chico que atiende el bar, observo a mi alrededor cuando se me acerca un hombre un poco ebrio-

- Hola -Le sonrío sin prestarle mucha atención- es la primera vez que te veo aquí

- Si, porque es la primera vez que vengo

- Podemos divertirnos un rato, te invito un trago -Puso su mano sobre mi hombro-

- La verdad es que solo vine a tomarme unos tragos sola, no quiero compañía, pero gracias -La música estaba muy alta lo que hizo que el hombre se acercara más hablándome al oído-

- Una chica vestida así no viene sola a un bar solo a tomarse unos tragos -Lo miré con desdén-

- Puedes que tengas razón, el punto es que contigo no quiero nada, me dejas sola por favor -Cuando me iba a girar el hombre me toma del brazo con fuerza-

- ¡Una zorra como tú no me va a despre…! -Las luces se encendieron encandilando mi vista, cuando pude volver a ver el hombre estaba en el piso con la boca ensangrentada-

- La señorita dijo que la dejaras sola -Escuché su voz y subí mi mirada y ahí estaba Kirill Volkov, alto, corpulento, ojos hermosos, pero se notaban fríos la mirada del mismísimo demonio, el hombre se levantó con la mirada llena de espanto y otro trajeado lo saco del bar-

- Te agradezco, pero no necesitaba la ayuda de alguien mas -Me apoye en la barra, Kirill me observaba de arriba abajo con deseo, eso me incomodó-

- No acepto esas actitudes en mi bar

- ¡Oh! Eres el dueño, deberías cuidar mejor que clase de gente entra -El bar tender al verlo me hizo llegar mi trago, pero sin la sonrisa que me mostro hace un momento-

Es la primera vez que te veo por aquí

- ¡Vaya, ese es lema de este lugar! Soy una turista estoy haciendo un tour por el mundo -No deja de mirarme fijamente y mi corazón esta a punto de salirse de mi pecho-

- ¿Y viniste al bar mas alejado de la ciudad? -Me encogí de hombros-

- No sabia que era un lugar prohibido y si es mucho problema venir y tomarme un trago pues me voy -Le paso por un lado cuando me detuvo tomándome por el brazo-

¿Puedo invitarte un trago? Quiero recompensarte por el mal rato, quiero ser un buen anfitrión

- ¡Está bien! A ti si te acepto un trago como recompensa por haberme librado de ese ebrio -Nos quedamos viendo fijamente, la energía que irradia este hombre es simplemente abrumadora, es muy guapo, no guapo queda corto es un dios griego lastima que sea un asesino, me llevó hasta el área VIP una sala iluminada con luces rojas, en el fondo había una cama redonda y varios espejos de cuerpo completo-

- Mi nombre es Kirill Volkov ¿El tuyo es?

- Hope Bennett

- Puedes sincerarte ¿Una joven como tú, en Rusia? ¿Qué estas buscando realmente?

- ¿Por qué les cuesta creer que alguien viene a divertirse? Soy joven, hermosa y con una herencia recién recibida gracias a la muerte de mi padre, estoy disfrutando de la vida -Me siento cruzando mis piernas sonriendo-

- ¿No querías a tu padre?

- Sonará cruel, pero no, él decidió alejarme, me encerró por años en un internado en Suiza, la única visita que tuve fue de una sirvienta y un día la escuche decir que yo le recordaba a mi madre y que no quería tenerme cerca, por suerte no le dio chance de cambiar su testamento y ¡aquí estoy!

- ¡Me agradas Hope Bennett! ¿Puedo hacerte una invitación? -Arqueo mi ceja, enrollando un mechón de mi cabello en unos de mis dedos-