«¡Es lindo… el idiota!» Pensó Ivanka en los brazos de Alexander con su corazón palpitante sin decirle una palabra. «Es bien bonita la escandalosa» Pensó Alexander sosteniéndola sin quererla soltar. Ambos se quedaron mirando profundamente y de manera fija el uno con el otro por unos segundos. Pero fueron interrumpidos por Georgie quien desesperado buscaba a Ivanka y desde lejos en la otra esquina de la calle la vio y fue corriendo hacia ella asustado, creyendo que Alexander le hacía algo, aprovechándose de que ella estaba borracha. —¡Vanka! De inmediato, Ivanka al escuchar la voz de su amigo Georgie se separó de los brazos de Ricky velozmente, porque se sentía extraña ya que según ella, no podía ver atractivo aquel hombre tan detestable a su parecer. —¡Suéltame! Enseguida, ella se ta

