Alessia —Stefan... — gemi en medio del beso, sus manos bajan despacio por mis muslos, colándose bajo mi vestido, su toque me quema. ¡Maldición! Quiero quemarme entre sus brazos. —Mariposa... mi mariposa.. — susurra dejando pequeños besos en la comisura de mis labios y mejillas. —Ven conmigo Alessia — pidió uniendo su frente con la mía. —Está bien — respondí con mi respiración agitada, él sonrió hermosamente, unas sonrisa de esas que me matan de esas que me dejan sin respiración. Stefan era un hombre serio y su aspecto a veces podría demostrar que es un hombre frío pero yo lo conozco y no es así, bueno en ocasiones pero me sonreía a mi y eso me enamoraba de él cada vez más. Él tomó mi mano y me sacó de ese lugar, mi corazón latía feliz, subimos a su auto el texteo algo en su móvil y yo

