Un deseo de Nochebuena

8. Todo tiene una razón

Respire profundo y solo los veo sonreír felices, un nudo se formó en mi garganta.

—¿Estás bien? —preguntó Claire.

—Kate... ¿es la novia de tu hermano? —pregunté.

—Eh... si... en verdad que estas extraña, eso ya lo sabias. Kate logro que mi hermano le hiciera caso y es por eso que odio aún más a Julien. Ella no es de mi total agrado.

—Pero si él es feliz —mencione.

—No juzgo sus gustos, pero espero que esa aventura termine pronto. Hay algo en ella que no termina de gustarme —dijo con su rostro serio.

Mire nuevamente a Kate y Julien, era tan extraño verlos juntos, él paso su brazo sobre los hombros de Kate y la acercó a su cuerpo con una sonrisa se acercaron a nosotro.

—Hola —saludo él con una sonrisa —hoy yo me quedaré en el restaurante Claire, lamento lo de ayer.

—Aja... esta bien —contestó Claire. La mirada de Julien se poso sobre mi, mi corazón dolió y me sentí un poco nerviosa.

«Estás vivo y eso es lo único que le importa»

—Amor ven conmigo, no quiero separarme de ti —dijo Kate. Aparte mi mirada de él y respire profundo, obligando a mis lágrimas no salir.

—Claire, creo que no podré quedarme, hay algo que debo hacer —le informe.

—Hola Amelie —saludo Luca.

—Hola Luca —lo saludé.

—No me dejes sola con esta bola de locos —pidió Claire.

—Lo siento —es lo único que dije para luego caminar a la salida.

—¡Amelie! Espera —Luca me llamo y sujeto mi brazo me giré y el estaba con una sonrisa —Ayer te llame y envié mensajes pero no respondiste, solo quería saber como seguías.

—No te preocupes estoy bien, lamento no haber respondido, ayude a Claire con el restaurante y termine muy cansada que no me dio tiempo de ver mi móvil —el me observó con una ceja arqueada.

—¿Me mentiste? —inquirió, algo en su voz me hizo sentir nerviosa —No era necesario que me mintieras para venir a ver a Claire, solo lo hubieras dicho —una sus manos acarició mi mejilla, sorprendida lo observé y quite su mano de mi rostro viendo a mi alrededor como si alguien nos fuera a ver —Nadie nos presta atención hermosa.

¿Por qué me llamaba así? ¿Qué rayos pasa aquí?

—¿No crees que ya no deberíamos ocultarnos? —preguntó.

—Lo siento, no estoy entendiendo nada —dije —Yo debo irme —en un rápido movimiento beso mi mejilla dejándome paralizada.

—Estás extraña, espero que podamos hablar luego —dijo y se alejó de mí.

Estaba confundida que había sido eso, rápidamente salí del restaurantes. ¿A qué clase de mundo había retrocedido?.

Fui hasta el lugar más romántico posible, una hora después me encontraba frente a la Torre Eiffel, ese era el tiempo que me tomaba llegar hasta aquí, me quedé ahí observando todo a mi alrededor y pensando en como había cambiado mi vida con solo un deseo, todo era un caos en mi mente, solté un suspiro y sonreí pues a pesar de todo lo mejor era que el estaba bien.

Fui a la cafetería que solíamos visitar Julien y yo, saque el dichoso móvil de mi bolso para poder revisar todas las llamadas y mensajes, tenía únicamente de Kate y de Luca. Revise las fotos de mi móvil y me lleve una gran sorpresa ¿Enq que momento paso esto?.

Habían muchas fotos de Luca y mías sonriendo, fotos de diferentes lugares y de los dos estando en esta cafetería. Negué yo no podía tener una relación con él.

Y si la hay ahora entiendo por qué nadie lo sabe, en el trabajo no se permites romances entre compañeros, ya que recuerdo que hubo un problema con el antiguo editor.

Pero esto.... esto no lo podía creer, deje el móvil de nuevo en mi bolso, no quería ver más. Necesito una explicación...

.....

Llegue a mi departamento muy tarde apague mi móvil pues no quería recibir las llamadas de Luca y las de Kate, no entendía porque ella me llamaba tanto, si eramos amigas pero no tan cercanas como Claire.

Preparé un Sándwich y una taza de chocolate, me asome a la ventana, el cielo estaba estrellado, me recordó a esa noche junto a Julien, vivo con mi cabeza llena de recuerdos ¿No hubiera sido mejor que yo olvidara todo?. Las horas pasaron y me quedé ahí frente a la ventana observando las estrellas de alguna manera me sentía conectada con Julien a través de ellas, es como si el también las estuviera viendo.

De repente observé un resplandor detrás de mí y me giré, ahí estaba ella, la que había hecho un enredo mi vida, su cabello rosa resplandeciente.

—Imagino que tienes preguntas — dijo tomando asiento en el sofá.

—Demasiadas, creí que no te vería de nuevo —comente.

—Estoy siendo muy buena contigo y veo que necesitas un poco de mi ayuda —dijo y señaló el espacio a su lado —Ahora dime ¿Qué quieres saber?.

—¿Por qué el ahora está con ella? ¿Cómo se supone que pueda estar con el? —pregunté.

—Bueno te dije que no seria fácil, solo quiero ver que tan grande es su amor —respondió —Amelie, hay dificultades que debes vencer, no puedo decirte que pasara, pero si puedo advertirte todo tiene una razón, si ella está con el es por alguna razón que yo no puedo decir. Si lo logras evitarás ese accidente, te lo dije Julien no era quien debía morir.

—¿El murió por alguien mas? —pregunté —No entiendo.

—Todos los humanos tiene un poco de maldad hay quienes deciden usarla y hay quienes optan por enterrar ese poco de maldad, debes arreglar eso y el estará contigo llevando la vida que tenían planeada —aseguró.

—No me voy a meter en su relación, además resulta que yo también tengo una —le reclamé, ella empezó a reír.

—Lo siento, te dije que nada sería fácil —se excuso.

—Si pero ¿no crees que ya he sufrido mucho?.

—Buen punto —soltó un suspiro —mira Amelie, no podía conceder el deseo sin obtener nada a cambio.

—Esto no será fácil, pero espero poder lograr salvarlo.

—Corre Amelie, que esta vez tiene a la muerte más cerca de él, pueden ser meses o semanas las que falten para ese accidente —como un rayo de luz desapareció.

Sus palabras me llenaron de miedo ¿Qué debo hacer? Espero que el destino esté de mi lado y así poder lograr que el logre vivir y cumplir sus sueños y yo los míos así no sea juntos, celebraré sus triunfos...