La señora Edith aparece en la puerta, pero la despido con un gesto. —Despeja la casa —ordeno mientras camino con Ravenna por las escaleras. La señora Edith asiente con la barbilla y luego desaparece. —Estoy mortificada —susurra Ravenna a mi lado incluso mientras Owen y Luke se despliegan a ambos lados de nosotros. —Nunca te avergüences por dar todo de ti por las personas que amas —dice Owen desde su lado. Su barbilla se levanta y su columna se endereza. —Gracias por eso. Él encuentra mi mirada de nuevo mientras se detiene para dejarnos entrar a Ravenna y a mí en la casa. Para cuando llegamos a las escaleras del segundo piso, la levanto en mis brazos de nuevo y la llevo arriba. No la bajo hasta que llegamos a mi dormitorio. Mientras la pongo suavemente de pie, susurro: —Volv

