Siento que el alma se me va a salir, no deseaba venir. No por malo si no por tantos recuerdos que me hacen odiarme. Pero aquí estoy, frente a la cripta en la que descansa quien fue mi esposa.
No puedo hablar debido al nudo en mi garganta. Los recuerdos me invaden a tal extremo que se sienten como si todo haya pasado ayer.
—Lo siento Alaia. Siento haberme ido el día en que estabas internada. Me gustaría cambiar las cosas pero no hay marcha atrás. Solo me queda seguir adelante por ti.
No estaba en mis planes enamorarme de quien era tu amiga. Pero lo hice y ahora nos volvimos a casar. Es una larga historia que algún día te contaré.
Solo quiero que sepas que soy feliz con ella. Feliz de haberme convertido en el padre de Haniel. Ahora tenemos una pequeña tan hermosa e inteligente. Se lla
