Verla en esa cama era una tortura para todos nosotros, sobre todo para sus padres y para Fernando que no se habían despegado de ella ni un solo momento.
Habíamos pasado una noche tenaz y es que había amanecido y nadie había podido cerrar los ojos ante la situación.
Había dado mi declaración a la policía, Alex había puesto seguridad en la casa sin que su madre sospechara, ya que no sabía nada de lo ocurrido.
Solo que Fanny había tenido un accidente y se encontraba en el hospital.
La puerta de la habitación se abre entrando el médico con unos papeles en sus manos.
—Les tengo una buena noticia en medio de todo esto.
—¿Qué sucede doctor? —Pregunta su madre.
—Realizándole unos exámenes de sangre a la señorita Lajara pudimos percatarnos que esta se encuentra en estado de gestación.
—¿Q
