— Esa chica es más interesante de lo que aparenta — murmuró bajo Roderick. Su tono era pensativo, casi como si estuviera desentrañando un misterio oculto. A él, en particular, le atraen los acertijos, y, en ese momento, parecía que había encontrado uno en ella. Sus palabras resonaban con una mezcla de curiosidad y admiración, como si estuviera anticipando la revelación de algo profundo. Yo, por mi parte, solo pensaba en lo que había dicho. La verdad es que no sabía qué pensar de ella. Mi mente seguía dando vueltas a sus palabras, las miradas, las reacciones... ¿Realmente estaba tan interesada en nosotros como para que me notara tan intensamente? — ¿Cuándo te sacaste los lentes? — me preguntó Rusther, mirando mis lentes en mis manos. Había estado tan absorta en mis pensamientos que ni siq

