Ha sido una semana muy larga, con Adrian las cosas cada día están peor, no se porque esta molesto todo el tiempo, incluso me a acusado de estar provocando a otros hombres cuando solo soy amable con alguien cliente o proveedor.
Soy dueña de mi propio restauran y el sabe que mi trabajo me apasiona.
Adrian y yo nos conocemos desde adolescentes, perdimos contacto cuando me fui a estudiar un tiempo a México, quería aprender más de la cultura y su comida. Mi madre es de allá así que nadie se opuso, pase un tiempo maravilloso y me hice de grandes amigos a los que después les perdí la pista.
Cuando regrese estaba decidida a emprender mi propia aventura culinaria a pesar de que mis padres no estuvieran de acuerdo, fue cuando me reencontré con Adrian empezamos una relación e incluso me aconsejo alejarme familia para que no interfirieran en mis decisiones y así lograr mis sueños.
Hace un año decidimos mudarnos juntos, el vivía con su madre así que se mudo a mi departamento...
- ya lo se! fue el peor error pero estaba muy enamorada.
Veo el reloj en mi celular y realmente no aguanto más, son apenas las 8 de la noche pero necesito ir a casa.
-Andy te quedas a cargo, cualquier cosa me llamas- Andy es mi empleada de confianza y lo más parecido a una mejor amiga que tengo.
_no te preocupes Su, necesitas descansar y por Dios no dejes que ese Idiota te culpe nuevamente de sus problemas
- Andy - le digo mientras cuadro los hombros y ella a parecer recordar que soy su jefa y se ve algo avergonzada- no le llames así por favor.
Cuando me giro a la salida choque con un hombre, caí de pompas al suelo, el me ayudo a levantarme y en mi prisa ni siquiera lo mire.
.estas bien? escucho mientras camino
- discúlpame! todo en orden! grito agitando mi mano sin mirar atrás.
Salí corriendo de allí subí a mi coche y me reí nerviosa. ¡Dios! no podía sacar su perfume de mi cabeza! encendí la radio y conduje hasta casa.
**Danniel**
Moría de hambre, era mi primer noche solo en la ciudad.
Encontré este trabajo hace unas semanas y cuando me mude mi mejor amigo Steven me ofreció un departamento que el tenia acá y vino conmigo desde Boston para asegurarse que estuviera cómodo. Así que no había tenido que cocinar durante días porque el se hacia cargo.
-Ey Dann, vamos a ir a cenar a un lugar aquí cerca, si te animas puedes acompañarnos, esta a solo unas calles de aquí y ya es tarde para seguir trabajando, no crees?
- Gracias- entorno los ojos tratando de recordar su nombre y al no conseguirlo el me lo dice
- Ben, soy Ben!
-Perdón Ben ya no lo olvidare, claro que voy o moriré de hambre.
Caminamos unas calles Ben, Loo y 2 chicas de contabilidad Betty y Steff, guapísimas y muy alegres.
Antes de entrar al local recibí una llama de mi madre y ellos se adelantaron.
-Hijo como estas? no nos extrañas o porque no nos has llamado? -Pongo los ojos en blanco y es como si la tuviera delante - No hagas esas muecas y respétame.
-Madre cuales muecas, solo han sido días muy largos y cansados. pero esta todo en orden.
-estas alimentándote bien? no te vayas a mal pasar. Oye Lora no ha dejado de llamar
-justo estoy llegando a comer con unos compañeros y huele delicioso. así que te hablo mañana madre.- le digo antes de seguir con ese asunto. Me apresuro a colgar y camino hacia el lugar cuando solo sentí su cuerpo chocar contra el mio, cuando la vi estaba en el piso y su cara roja, le di la mano y sentí una extraña electricidad pero ella ni siquiera levanto su rostro
.estas bien? - le digo mientras sigue caminado
- discúlpame! todo en orden! - su voz me dejo hipnotizado hasta que al fondo escucho a mis nuevos amigos llamarme