Tener a Emma tan cerca hace que mi corazón retumbe al igual que un tambor, desee odiarla, pensé que no me afectaría, intentó escudarme de esta mierda que siento en el pecho. Bebo con ansiedad, me arrepentí haberla lastimado, hablé desde la indignación que me causa estar separado de mi hija. Fui un patán con ella, es la madre de mi amor bonito, reflexione, no desearía jamás que a mi pequeña pelirroja un imbécil como yo lastimará aunque sea uno de sus cabellos. Me emborrache hasta no poder caminar, quiero arrancarla de sus manos, pero no puedo dañar a Emma como lo hizo conmigo, aparte sería un choque emocional demasiado grande que rompería su niñez y mi hija lo es todo. Saber que de una forma u otra se cumplió mi sueño de tener una pequeña pelirroja corriendo por la casa me da esperanza, m

