Capítulo 45. La esencia del deseo

2937 Words

―Soy yo, Ismael―resonó la voz grave de aquel mercader porque padre no se podía llamar, desde el otro lado de la puerta. Absalón, con los dientes apretados por la interrupción de aquel momento íntimo, mirando a Saleema, decidió dejar su marca. Se fue directo hacia su cuello, ella trató de apartarlo, pero era imposible porque ya lo tenía allí. Sus labios se cerraron sobre la piel delicada del cuello de ella como un sello ardiente, succionando con fuerza posesiva y deliberada. Quería dejar una marca visible, un recordatorio púrpura de su dominio que ella no pudiera ignorar cada vez que se mirara al espejo. ―Ahh―el grito de ella resonó en la habitación como una melodía para sus oídos, una sinfonía de sorpresa, dolor y aquella excitación que ella se negaba a reconocer pero que él podía senti

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD