- ¿Por qué me ves así? - preguntó Álvaro una vez que me senté en la cama de la habitación que había rentado para mantenerme cautiva. Lo fulminé con la mirada. - ¿Cómo quieres que te vea después de lo que me estás haciendo? - le recriminé enfadada, comenzaba a sentir que ya me daba lo mismo lo que hiciera era muy difícil escapar de él y no sabía si Esteban podría buscarme. - Tu lugar es a mi lado no con ese imbécil - soltó con furia mientras caminaba de un lado a otro por la habitación. - ¿En contra de mi voluntad? - sonreí sarcástica. Quise ponerme de pie, pero el aprovecho el movimiento para tumbarme en la cama y subir su cuerpo sobre mí. - Tu eres mía, desde un principio lo fuiste y después también - dijo con voz grave cerca de mi oído mientras apretaba con fuerza u