PROLOGO

1333 Words
 Vamos trata de recordar, quien gano ese partido me quiero ganar ese premio, ayúdame por favor, estos nervios me tienen amnesico -le dijo Alvaro a Julia. -Deja de ponerme nerviosa y mas con tus gritos, ademas quien te dijo a ti que yo soy futbolista, pero creo que fue Alemania quien gano ese año -ya sabes si pierdes no me culpes. Ok, ya voy a mandar la respuesta,-dijo él con los nervios de punta. -Epale Alvaro, quien esta atendiendo el negocio de Jacinto, yo oigo gente pegando gritos allá afuera. -Dios, Julia tú no ayudas -cada vez que estoy por cumplir un meta me quitas el animo-respondió él con el ceño fruncido. -Bueno yo, mejor me voy, ya tengo que irme al curso nos vemos en la noche, y pendiente del negocio de tú amigo por algo confía en ti, -exclamo ella muy seria. -Chao, que te vaya bien y no te preocupes ya voy a ver que quieren aquellos dos, con tal y no sea para pedir fiao, por que los mando a la porra, solo el tonto de Jacinto hace esa burrada, invertir sin tener seguridad que le van a pagar, -aclaro Alvaro muy serio. -Otra cosa hermanito si ganas me brindas ya lo sabes, -ella sonrió y le lanzo un beso. -Vamos anda vete ya, mira que si llegas tardes no vayas a decir que fue por mi culpa no se por que tardas tanto en arreglarte si siempre te vez igualita de fea, -le dijo él sonriendo y le devolvió su beso. Julia salio de la casa muy alegre, de pronto miro hacia el negocio de Jacinto y habian varias personas pegando gritos desde la reja y giro de inmediato antes de que la llamaran, de seguro le iban a preguntar por Alvaro y perdería mas tiempo. Alguien la llamo pero ella acelero el paso he hizo que no los oyó. Ya llevaba dos cuadras de camino, cuando alguien la tomo de un brazo y la hizo darse vuelta. -Que demonios, santo Dios ¿Jhonny?. -Hola, cariño como estas, ¿a donde vas con tanta prisa? ¿llevo ya rato llamándote desde que saliste de la casa? Parece que te va persiguiendo alguien -él sonrió dulcemente. Ella salto de inmediato a sus brazos, era su mejor amigo habia regresado, ya tenia dos años que se habia marchado a estudiar en el ejercito. -¿Cuando regresaste? ¿Por que no me llamaste?  -Llegue anoche, pero ya sabes como es mi vieja, sino recibo su atencion primeramente se enoja y anda toda amargada prefiero consentirla a ella primero y después a mis chicas preferidas -, él sonrió y le dio un beso en la mejilla. -¿Como que a mis chicas preferidas? osea que no soy yo tú chica preferida y mas o menos a quien de vemos el honor- pregunto ella con sus ojos punzantes. -Ya te contare luego, ahora dime ¿a donde vas tan apurada? -A mi clase de Ingles y tengo un examen dentro de media hora, estoy terminando un curso, ya sabes mi gran obsesión por ser bilingue. Y no puedo faltar, así que no me mires así por que no faltare. De verdad es muy importante para mi, respondió ella muy seria. -Te estas tomando muy en serio lo de los idiomas, me alegro mucho -, dijo él admirado y ¿a que hora sales? -No, te puedo darte un tiempo especifico es que mis examen final es oral completamente y no se cual va a ser el orden o si lo aremos grupal, esa era el tema de discusiones que tuvimos ayer y no terminamos de ponernos de cuerdo. Ya la profesora dirá, cuando lleguemos por eso es que voy tan acelerada-, dijo ella con el pulso a millón mientras caminaba tan apresuradamente. -Ok, mientras tú estas con tu bendito examen yo voy a ser otra visita y te llamo mas tarde a eso de las seis ¿te parece?  -Si, perfecto - asintio ella. Y me alegro que hayas regresado, tenemos mucho de que hablar. -Bien entonces, hasta mas tarde -él se despidió dándole otro beso en la mejilla y con los ojos con cierta tristeza. Jhonny la dejo seguir su camino, le pareció mejor no seguir distrayendola, por ahora era mejor dejarla concentrarse en su propósito que era su examen. Julia era su mejor amiga desde chico siempre habian compartido historia juntos hasta de agarrarse a puños con unos chicos por que les querían roban un par de naranjas. Jhonny siempre que se sentía triste recordaba esa historia y termina riéndose de las locuras de Julia. Para él, Julia representaba su amor de niñez, pero un amor de inocencia que no transcendía a otra cosa, era así como los se veían. Los dos se cuidaban mutuamente, si uno lloraba el otro también y si reían de igual manera. Pero esta vez, contarle a Julia que estaba enfermo iba a ser muy dificil para él, sabia que Julia se pondría muy triste y no querría separarse de él. Su enfermedad, estaba siendo tratada con los mejores médicos en el Hospital Central del Ejercito. Allí logro hacer muy buenas amistades, pero no tenia mucha esperanza de poder salvarse aquí, pero uno de los médicos que lo estaba atendiendo le hizo una proposición de llevarlo a Estados Unidos, él conocía a uno de los mejores médicos en Bacterias que lo podrían ayudar. Pero aun no lograba tomar la decision de dejar a su madre tan sola con su hermana era muy dificil para él. Julia llego esa tarde a su examen final de curso, estaba muy feliz ya estaba culminando con uno de sus proyectos, ahora solo quedaba por empezar por encontrar un buen trabajo para ayudar a su hermano Alvaro, ese era el compromiso que tenían los dos. La tarde paso muy lenta, cuando a Julia le toco su turno sintió que su estomago se comprimía del susto en eso recordó a Jhonny y sus pensamientos se tranquilizaron el susto se fue y logro concentrase. Así eran ellos, como una especie de tranquilizante, solo quería terminar el examen y buscarlo. El primer año cuando Jhonny se marcho, siempre que le daban permiso de visitar a su familia pasaban las vacaciones bailando y paseando en bici por todo el pueblo, en las tardes se iban al rió y en las noches se sentaban en las aceras de las casas a contar las estrellas. Lo que no se imaginaba Julia era que esta vez, podía despedirse para siempre. El examen se prolongo mas de lo normal ya que se convirtió en un debate entre compañeros y los profesores la verlos dialogando tan amenamente no los interrumpieron, luego de un buen discurso y de dado por asentado todo, Ana Maria la profesora a cargo les anuncia que habian aprobado con la mayor calificación. Todos saltaron de alegría y se quedaron a celebrar un rato más, Julia olvido por completo que Jhonny la llamaría y su móvil estaba en silencio. Ya cuando decidieron despedirse, Julia revisa su móvil y vio unas quince llamadas de la casa de Jhonny, en eso pega un grito: -Dios, Jhonny, me olvide - santo Dios me va a matar -como pude olvidarme -, se dijo a si misma. En eso uno de sus compañeros le ofreció la cola en la moto y no lo pensó dos veces. -¿Te llevo a la casa? -No, Orlando en este momento necesito que me lleves a casa de la señora Alicia Betancourd, por favor. ¿Puedes? -Sí, tranquila, no me desvió mucho de mi casa, ponte el casco allá delante están unos polis pidiendo documentación y pobre de aquel que no tenga casco puesto. En ese instante suena nuevamente el móvil, pero Julia no lo atendió, decidió llegar a encontrarse en su casa sin saber que él, estaba en el hospital del pueblo. Luego que la dejo esa tarde se sintió un fuerte dolor que tuvo que irse de inmediato al Hospital Central. 
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