Narra Harry .
Esa niña debe de aprender a respetarme, me colmaba la paciencia cada vez que se pasa de broma conmigo. Maddie me había tomado mucha confianza y como no, si yo se lo permití. Eres tonto . Tire mis pantalones a la basura luego de mandarla a casa con Louis; una gran parte de mi quería ir a buscarla y disculparme, pero lo que quedaba de mi antiguo yo me decía que no tenía que ser débil.
El timbre sonó luego de unos momentos, y claro no me sorrendería que fuera Maddie. Ella siempre era la que venía a pedir disculpas.
–¿Que quieres? - pregunte aun molesto luego de verla en la puerta. Ella me miro con esos ojos grandes de bambi y paso sin pedir permiso. no seas débil . me repetía. si la perdonas, nunca aprenderá.
–Disculparme– dijo con un tono muy suave. Cerré la puerta y me giré para verla.
–Y porque quieres disculparte? - pregunte mientras me cruzaba de brazos.
–Por lo que hizo… Harry por favor– dijo acercándose a mí, pero enseguida se detuvo. - lo siento, no debí hacer eso– me miro.
–Hacer que? - pregunte muy serio. Ella resoplo y suspiro.
–Ya sabes a que me refiero– dijo un poco molesta mientras miraba sus manos.
–Ah y te vas a enojar? - inqueri. Maddie_ se cruzo de brazos y fruncio el ceño.– será mejor que te vayas– dije abriendo la puerta de la casa .– es muy noche–. Mire el reloj marcaban las 10:34 pm
–Ya me disculpé Harry, que más quieres que haga? - me miro muy seria. ¿De verdad lo siente?
–Te aprovechas de mi confianza y realmente me sacas de quicio– le dije y ella huyo de mi mirada. - vete Maddie, esto no es por lo de ahora, simplemente debes de volver a respetarme como lo hacías antes–.
–Pero antes era tu esclava y ya no lo soy! - replico. - ahora soy tu… –la mire atento y ella se calló.
–Ahora eres mi qué? - pregunte ansioso. No respondió.
–No me iré– dijo para luego darse la vuelta y sentarse en el sofá.
–Vale entonces yo me voy– bufe. Tome mi chaqueta y las llaves del auto; antes de salir por la puerta escuche un sollozo. - ¿estas llorando? - pregunte sorprendido. Maddie tenía la cabeza gacha. Me acerqué y me puse en cuclillas frente a ella para poder verla mejor. pobre cabecita hueca .– si… estas llorando– asegure luego de verla unos segundos.
–bueno ya déjame no– replico y se levantó de golpe. – a diferencia de ti yo si tengo sentimientos–me miro de mala gana aun con los ojos llorosos.
–¿me estas llamando desalmado?... de nuevo? – reí sin una pizca de gracia. Estaba que hervía de enojo por culpa de esta mujer.
–te llamo lo que eres– respondió caminando hasta la puerta y se fue.
–Maddie!, ¡espera! – grite, pero ya era tarde. Jodida niñita.
No iba a ir detrás de ella, claro que no… Tal vez mañana.
***
No podía creerlo de verdad me estaba disculpando con Harry y me trata así. Solo fueron unos pantalones nada más. Me sentía muy mal.
–hay guapa! – escuché a alguien decir, seguí caminando con el corazón en la mano. Al menos Harry se hubiera ofrecido llevarme ya que era tan tarde. –si Maddie tú! – volví a escuchar.
–Louis? – pregunte al verlo acercarse a mí. Me sonrió. – qué haces por aquí? – pregunte sorprendida.
–iba por un café, quieres unirte? – pregunto con esa sonrisa tan especial.
–sí, por favor– dije y empezamos a caminar.
–que no te deje en tu casa? – rio divertido en cuanto entramos a la cafetería. Reí.
–no puedo pasar más de cinco segundos allí– respondí. Todo es gritos y gritos.
–y donde dormirás ahora? – pregunto y tomamos asiento en una mesa de la esquina. La mesera llego y tomo nuestra orden.
–no lo sé, tenía la esperanza de que Harry me perdonara y me dejara dormir allí– sonreí, pero realmente me sentía mal odiaba cuando Harry me trataba mal ¿Quién no? – pero no funciono–.
–puedes quedarte conmigo– dijo y me dio una mirada llena de seguridad