-Fer ya es hora- escuché un susurro -Al abrir mis ojos me encontré con los de Alexander, él tenía su mano en mi mejilla.- -Me levanté renovada, no sé cuánto tiempo había dormido pero me sentó de maravilla.- -¿Puedo utilizar tu baño?- -Claro- -Me levanté y caminé hacia el descalza.- -Lave mi rostro, tuve que volver a maquillarme, peine mi cabello y arregle mi traje, una vez salí, Alexander me esperaba con mis tacones en su mano.- -Me acerqué a él, iba a tomar mis zapatos pero él se adelantó y me tomó de la cintura, los dos estábamos a escasos milímetros de besarnos.- -¿Qué haces?.- pregunté -Sin responderme me besó, escuché el ruido que causó mis zapatos al caer al suelo, Alexander me levantó en sus brazos, yo ahora me aferraba a su cintura con mis piernas.- -Me sentó en el

