Domingo, 24 de marzo. Habitación de Xander. 6:58 am. —Magnus — Xander flaquea, inseguridad fluyendo a través de sus palabras —. ¿Qué te hizo cambiar de opinión? Sus cuerpos aún mantenían la cercanía y la mirada penetrante de Alekséi ponía cada vez más ansioso a Xander. Pero la curiosidad, por desgracia, forma parte de su naturaleza como una segunda piel, no puede obligarse a sí mismo a no tener la necesidad de averiguar el porqué del cambio tan repentino en el Alfa. —Una persona que te aprecia mucho me hizo reconsiderar mi actitud — hace una pausa, sintiéndose cautivado por esos hermosos ojos que lo observan con atención —. Fui un idiota, gatito. Lo acepto y te aseguro que no volverá a pasar — Xander sonríe en respuesta, pero enseguida su semblante se vuelve serio. Desvía su mirada de

