Estaba observando a Curt, que tenía a Layla de pie en posición de firmes, tal como había hecho con Abigail, y le estaba dando órdenes breves y bruscas mientras inspeccionaba su delicioso cuerpo, cuando Martin habló.
'Caballeros, cabe señalar que la encantadora Abigail está haciendo su primera mamada ahora mismo, y lo está haciendo bastante bien.'
Todos miramos y aplaudimos en señal de felicitación mientras Abigail maniobraba con cierta torpeza su boca alrededor del glande de Martin. No estaba para nada dotado, y su pene era nudoso y abultado, y se desvió repentinamente hacia la izquierda, como el tocón de una vieja raíz; pero quizás era el tamaño perfecto y agradable para que Abigail experimentara con él, ya que era el primer pene que había tenido en la boca.
El cronómetro volvió a sona
