Punto de vista de Miller
Desperté para encontrarme en la parte trasera del camión, con los brazos atados y un trapo en la boca para evitar que hablara o hiciera algún sonido.
Me sentía enfermo y mareado, y mi mente estaba en blanco sobre lo que me había sucedido.
Recordaba a Ed hablando conmigo, luego nada. Podía escuchar voces afuera e instantáneamente supe quiénes eran.
Max y Ed.
Escuchaba atentamente su conversación, tratando de entender qué estaban tramando. Era como un acertijo.
No tenía ni idea.
—Necesita mantenerse fuera de esto —escuché a Max decirle a Ed, quien suspiró y gruñó en respuesta.
—Me debes mucho, Ed, y quiero a esa chica para mí. Si quieres que tu pequeño secreto sucio se mantenga oculto, te sugiero que convenzas a tu hija de aceptarlo —Max comenzó a gruñir.
—R
