19

539 Words

Tío Ed no podía mirarme, haciéndome sentir aún peor de lo que ya me sentía. Sabía que no me estaba diciendo toda la verdad. Fue solo cuando Max carraspeó y habló que me volví hacia él. —Isla, creo que ayudaría si ambos se calmaran. Puedo entender tus preocupaciones, pero asegúrate de que tu familia no sufrirá daño alguno —prometió él, y asentí, abrazando mis rodillas y preguntándome cómo había llegado a esto. Extrañaba mi vida antes de regresar a Pembroke, y ahora la mala suerte parecía seguirme a todas partes. —No son tu familia —me dijo Tío Ed y gruñó. Pude ver que estaba intentando controlar la ira que llevaba dentro. Su lenguaje corporal lo delataba, con sus puños apretados, cara roja y voz elevada. Max le envió una mirada de advertencia, pero él siguió ignorándola. Estaba confun

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD