Lo mejor ante mis ojos

Desastrosamente adorable.

Pov Off. 

Este día amenazaba con ser una total porquería. No puedo creer que exista tanta incompetencia a mí alrededor. Desde hace una semana que estoy buscando a alguien que sepa al menos prender una estúpida cámara fotográfica y lo único que he podido encontrar han sido estudiantes aficionados o amateur con ganas de que mi empresa los reclute para llenarse los bolsillos de dinero y tener su hoja de vida impecable a la hora de alardear que han trabajado en mi empresa.

Llevo dos horas entrevistando un montón de estúpidos que no me llegan ni a los tobillos, unos ni los escucho y los otros sencillamente les digo que no sirven para nada. Se supone que debo conseguir a alguien preparado y que me inspire un poco de confianza para asistir a los eventos que Grammy Televisión, sacará para este mes. Pero ninguno me ha servido y no me interesa seguir viéndole las caras de mediocres a ninguno.

Dos horas después mi secretaria anuncia la llegada de un nuevo postulado. Juro que si me sale con estupideces de aprendiz lo voy a sacar a patadas y comenzaré a tomar las fotos yo mismo y se acabó. Espero que sea el último por este día ya que no tengo paciencia para aguantarme a nadie más.

Que carajos se están creyendo ¿Qué pueden engañarme a mí, al empresario más reconocido de Bangkok?

— Buenos días señor Jumpol — la secretaria entra  y ni siquiera le prestó atención. Lo único que veo en ella todas las mañanas, son esas lindas piernas que tanto he tenido alrededor de mi cintura mientras la embisto encima de mi escritorio. El único problema es que es tan fácil que me hastía pensar en tener a alguien que ha pasado por tantos hombres. 

Además, estoy cansado de tener que meterla a media noche solo para saciar unas ganas que no es capaz de quitarme del todo.

— Aquí está el Señor Phunsawat — continua pero yo sigo de espaldas sin querer mirarla ni a ella ni al estúpido que debe estar allí de pie mirando mi oficina como si fuera la reliquia más costosa que jamás haya visto.Y no lo culpo, por que este lugar es digno de parecer un penthouse.

A eso, sumando el tono seductor que está empleando mi secretaria Jane, cosa que me revuelve el estómago provocándome arcadas.

Levantó la mano haciéndole señas para que entre y entre dientes escucho como me ha llamado “arrogante”. Si así comenzamos estoy seguro que estará a nada de ser el próximo en no pasar la entrevista.. Se atreve a entrar insultando, cuando para mi sus insultos son un halago. 

— Disculpe, ¿acaba de murmurar algo? — suelto para que sepa que acabo de escuchar perfectamente lo que dijo entre dientes.

Si antes se sentía incómodo ahora debe querer salir corriendo antes de patearme las bolas. Cualquiera de las dos cosas no me importan ya que es mi día a día lidiando con tontos.

— Tome asiento por favor, es usted el señor… ¿Phunsawat? — intento recordar su apellido a pesar de que no me interesa. Sigo manteniéndome de espaldas a él.

— Si. — dice con un tono de voz dulce pero percibo un leve temblor al hablar. — Soy Gun Atthaphan, señor. — me doy cuenta lo nervioso que está y si no fuera porque le estoy dando la espalda juraría que está muerto de miedo.

— Entonces, dígame señor Atthaphan. — me giro y lo veo a los ojos por primera vez desde que entró. — Es en realidad usted un fotógrafo profesional o solo un estudiante aficionado que viene a mi empresa para vanagloriarse de que trabajara bajo la firma de la gmmtv, ¿me equivoco? — suelto y noto como le cambia la cara furioso por como acabo de bajarle los humos.

— Por supuesto que no señor. — intenta justificarse. — Yo soy un profesional de la fotografía, estudié y me prepare en una de las mejores universidades de este país y para serle sincero ya he trabajado con grandes empresas, las cuales han permitido que yo… — suspiro cansado de escuchar su discursito de cómo es un buen estudiante y blablablá.

Sinceramente nada de lo que diga me interesa y está tan absorto en su presentación que no se da cuenta que voy caminando hacia él, parandome de frente hasta cubrirlo por completo con mi cuerpo.Es como si lo cubriera por completo y queda con el portafolio a medio sacar de su bolso.

Alza la vista y siento algo en el pecho que me atraviesa como si un rayo me atravesara o el impacto de una bala. Sus ojos son como un pasadizo hacia lo desconocido y me es inevitable no pensar en cómo una persona no puede perderse en ellos.

— Yo... yo. — tartamudea. Me mira y es como si no fuera capaz de apartar la mirada de mi. Lo entiendo y recibo de esas miradas a diario. Aunque admito que no me molesta que sus brillantes ojos estén conectados con los míos.

— No era eso lo que estaba por hacer. — indago. — Sorprenderme con su portafolio para descrestar y que me asombre por un trabajo universitario, ¿Es así señor Atthaphan? — no le quito la mirada de encima y desde aquí veo cómo aprieta la carpeta contra su pecho.

Está molesto y si no fuera porque parece contener el insulto que se le atraganta ya se me hubiera lanzado encima porque parece que estuviera echando humo por las orejas. Aprieta la mandíbula y toma aire conteniendo el grito o el regaño, yo que sé. 

Camino de vuelta rodeando mi escritorio y tomó la carpeta con su hoja de vida. La verdad es que no hay muchas cosas interesantes. Tiene veintitrés años, estudiante de fotografía, vive con su madre y solo ha realizado pequeños trabajos con algunos colegas que poco conozco.

— Mire, le voy a ser sincero. — explicó sin siquiera tomarme la molestia de mirarlo. — Estoy en busca de alguien que sepa verdaderamente lo que está haciendo. Que maneje una cámara profesional y no una de principiantes. Que sepa capturar momento, movimientos, luz y que esté constantemente de evento en evento sacando las mejores fotos fuera y dentro de esta empresa. — paso la página y tengo en mi carpeta algunas de las recomendaciones de dichas empresas.

Sin embargo no he encontrado ninguna fotografía.

— No voy a explicarle nada a nadie, porqué se supone que al venir aquí está consciente de todas mis exigencias.

— Si, yo...

— Entonces. — lo interrumpo. — Si usted está verdaderamente preparado para hacerlo y cree que puede, tiene que demostrármelo sin tener que sacar un estúpido portafolios de estudiante universitario para que yo le apruebe lo que sea que dice sabe hacer. — levantó la mirada buscando algún indicio de que está cansado de esto y se quiere largar. Pero no, está allí mirándome fijamente sin decir nada.

>> Realmente te estas tragando las palabras ¿no? Pequeño insolente. > Pero qué  estoy pensando, ¿acaso me estoy volviendo loco? > ¿Qué demonios pasa, Jumpol?> Que mierdas te pasa, ¿ De verdad te estas volviendo loco? > Esto es exquisito La respiración de la persona que está haciendo maravillas en mí, la escucho cerca de mi oído intensificando los movimientos de sus caricias, sus labios rozan los míos y la excitación me toma.

Ya no puedo resistirlo más, tengo que tomar a la mujer que está logrando llevarme a un punto sin retorno. La tomó por la cintura y giró nuestros cuerpos quedando encima de ella.

Tengo los ojos cerrados inhalando su aroma a frutas. Tiene una piel sedosa y el recorrido de sus manos por mi espalda lo único que hace es encenderme más.

Le beso el cuello y escucho un pequeño gemido que me descontrola. Estoy que reviento y solo me concentro en las veces que voy a embestirla.

Alzó la mirada para ver sus ojos, pero mi sorpresa es grande al darme cuenta que dicha mirada no pertenece a cualquier mujer, es la mirada que tanto me ha estado perturbando durante toda la noche.

Me aparto para saber si la mente me está jugando sucio pero lo que veo es a él, sobre mi cama, desnudo y envuelto en sudor. Me está sonriendo con picardía mientras muerde sus abultados labios.

>> ¿Qué demonios estoy haciendo?

No, esto no está bien y debo detenerlo, pero las sensaciones en mi cuerpo son tales que no quiero parar.

Lo acaricio y me araña, lo beso y me muerde. El contoneo de sus caderas me enloquece y…

— ¡Mierda! — despierto de un salto empapado de sudor.

Volteo a todos lados buscando al culpable de mis desgracias. No encuentro nada sobre la cama y lo único que me detiene es ver que estoy desnudo y con una erección.

¡Maldición! No puedo creer que acabo de masturbarme pensando en… 

{ ... }

♥️ Holis Holis ♥️

Disdruten de una historia donde nada es imposible a la hora de mirar a traves de tus ojos.

¡Gracias y disfrutenlo!

Nailu P. ✨