Señor Luthor

Te voy a ganar

Durante el tiempo de ducha de Patrick, Aurora pidió a sus cuñados el número de Adam Luthor, su suegro encantado decidió darle un tour por la empresa y explicarle un poco los requerimientos para ocupar el puesto que va encima del de su futuro esposo.

Ella sonrió cuando acabaron el recorrido y regresaron a la oficina principal.

—Este es mi currículo, podría adaptarme tanto a la parte industrial como a el área administrativa. Tengo un máster en producción cervecera y un bachillerato en administración, no me gustó mucho, soy muy buena organizando cosas y la gente cree que soy tonta, así que vengo con factor sorpresa.

—Excelente, voy a preparar una reunión con directores, te voy a mostrar un poco el trabajo, que en realidad no creo que necesites, pero, en cuanto estés cómoda, me iré.—Adam se quedó en silencio. —Disculpa, ¿estás embarazada?

—¿Me veo embarazada?

—No, es solo que Patrick está pasando por algo y le escuché con su hermano hablando sobre jubilarse para criar a sus hijos.

—No estoy embarazada, pero, es un hombre obcecado, y mi papá le ha sembrado unas ideas de un solo negocio, una sola familia y creo que lo que más le gustó fue tener un hijo. Tengo entendido que su prioridad por mucho tiempo fue la empresa y la muerte de su esposa lo ha cambiado.

—Claro, tienes razón.

—Estoy cero embarazada.

—¿0.0% de posibilidades? —repite su suegro.

—Como un 0.1%—Adam ríe,

Tendría una semana de embarazo y esta familia sería un detector indiscutible, tampoco se sentía embarazada y habían usado protección, tenía que recordárselo a Patrick, pero, él siempre se lo ponía.

—Hola, no estaba tu secretaria. —dijo Jane. —Hola —Saludó primero a Aurora y le dio un beso en la mejilla a la joven, luego fue a besar a su esposo, Adam sonrió y le preguntó que estaba haciendo en la oficina un jueves.

—Te extraño, aunque no lo creas—respondió la mujer y tomó asiento junto Aurora. —No tengo nietos que cuidar, mis hijos están ocupados y dije: Janie, tienes un marido que te ama. —Los dos sonrieron. —¿Quieren ir a comer conmigo? Compré unos tickets del teatro para que no te comprometas Adam y compré un vestido bonito.

—Está bien, cielo.

—¿Aurora, quieres venir a comer?

La puerta de la oficina se abrió.

—Escuché que mi mamá estaba de visita—Dijo Patrick y Jane se volteó. —Hola… ¿Qué haces aquí? —Aurora rodó los ojos y luego sonrió.

—Como me llamaste tonta para darme la bienvenida a la familia, pensé, voy a hacerle atragantarse con esas palabras —Patrick abrazó a su madrastra y la llenó de besos.

—Jane no tenía idea del negocio y lo hizo súper bien. Era una heredera mucho más tonta que tú.

—No puedo creer que seas tan grande y tan cabrón. —Jane le golpeó con la bolsa y los cuatro rieron.

—¿Dónde está tu hermano?

—Acaba de irse con su mujer a comer.

—Esos dos, Asher dice que le preocupa Addison suena muy decidida, y aquí entre nos, Drake contrató tres abogados de custodia.

—Para vivir peleando, para qué estar juntos. —comentó Adam mientras tomaba sus cosas.

—Vamos a almorzar y hablamos de la boda y los nietos que vamos a tener.

—¿Sabes, Adam, hay gente que cree que el matrimonio es para toda la vida?

—Sí, mi amor, cuando eres feliz.

—Sí, papá, deja de estar divorciando gente y animando a gente a hacerlo.

—Vamos, Aury, tú eres la única que me cae bien de este grupo—Dijo Adam y su esposa e hijo rieron. Aurora caminó tomada del brazo de su suegro, él encantaba lo dulce que era Adam Luthor, era imposible no sentirse feliz por tener a una persona siempre guardando tu espalda.

El celular de Aurora sonó y tomó la llamada de su padre.

—Hola, estoy saliendo a comer.

—Bien, quiero que Patrick, tú y sus hijos vengan a cenar mañana. Puedes invitar a sus padres.

—Les daré la invitación de tu parte.

—Vale, me envías restricciones alimenticias para el chef.

—Claro, papá.

—¿Cómo has estado?

—Bien, tuve una entrevista de trabajo aquí en Luthors, y creo que me lo van a dar.

—Wow, como sirve acostarse con el jefe. —bromeó. —Adiós, Aurora, nos vemos.

—Pa, quieres venir a desayunar mañana, no voy a cocinar, voy a comprar las cosas.

—Já, bueno, me gusta esa niña Meredith.

—Qué novedad.

—Adiós, tengo una vida.

Ella sonrió y guardó el teléfono.

Llegaron al parqueo y Patrick tomó a aurora de la mano para que fuera con él en el auto. —Tu papá y yo estamos planeando los papeles de la adopción.

—Ay, Dios, tú los haces y ellos se juntan.

Jane y Adam fueron al auto de Jane y ellos al de Patrick. El joven fue a abrirle la puerta y rodeó el auto. Cuando subió le dio las gracias por intentarlo. Él puso su mano en su rodilla y sonrió.

—¿Entonces qué dijo mi papá?

—Que iba a preparar una reunión, voy a ser su sombra / mano derecha, y en unos meses planea soltarme la mano, pero tú vas a estar ahí.

—Tengo algo que decirte.

—Nada bueno viene de esa frase, ¿podemos disfrutar que tu mamá no me odia y mi papá viene a desayunar mañana porque adora a Meredith?—Los dos rieron. —No es incómodo.

—Aurora, nadie me tuerce un brazo si no quiero, la persona más importante en mi vida es Jane Luthor, y ni a ella le permito tanto. Simplemente, siento que tengo que hacerlo, y ya. Es como una buena oferta de negocios, con pluses.

Ella forzó una sonrisa, lo único que quería escuchar era que lo hacía por ella, así fuera por lástima, pero, por y para ella.