El doctor la dio de alta a Nicol porque el peligro ha pasado, ella solo necesita reposo y tomarse el medicamento indicado, todo está listo para su salida, ella sale de la habitación donde la atendieron. Cuando levanta la mirada se tropieza con la sorpresa que ambos hombres la esperan a la salida.
—Se encuentra bien Nicol. —Brayan la toma de la mano.
—¿Qué haces, suéltala?
—¡Es que no ves, la estoy ayudo!
—Deja, yo me haré cargo de ella.
—No, no pienso ir contigo. Brayan puedes llevarme al hotel.
—Tus deseos son órdenes.
—¡Crees que te dejaré ir con él, te vas conmigo!
—Cristhian, por favor, déjame ir, no quiero que tu prometida se haga una mala idea de nosotros. Iré con Brayan.
Cristian se quedó sin palabras, solo la vio alejarse de él de la mano de su hermano, no se lo impidió, p
