Andrew. Salimos del departamento y tomamos el elevador. Todos estábamos tensos y algo enojados. Bajamos hasta el último piso y finalmente abandonamos el edificio. — ¿Qué te sucede, Jordan? —grité cuando ya estábamos afuera. —Nada, creo que yo estoy muy bien. Pero ustedes... Ustedes saben perfectamente lo que hicieron. — ¡Nosotros no hicimos nada! Tú fuiste quien abandonó la banda. Jordan rio sarcásticamente. Su presencia aquí no era para nada buena, sobre todo si no sabíamos cuáles eran sus verdaderas intenciones. A pesar de que apenas y nos conocíamos, podía darme cuenta que algo entre nosotros simplemente no andaba bien. —Esas niñas quieren saber la verdad y si ustedes no se lo dicen, lo haré yo. Sacó su cajetilla de cigarros del bolsillo de su pantalón y después su encendedor. Co

