Izan subió hasta el último piso del Gran Hotel Plaza. Cuando él ama de llaves lo recibió ni si quiera se esperó a ser anunciado, caminó directo a la sala de estar topándose con la sorpresa de que Christopher Davis estaba sentado tomando té con su tía. Izan arqueó una ceja al verlo.
—¿Qué no estabas en el extranjero? —preguntó sin tapujos.
Christopher miró a Isabella.
—Izan, siempre que vienes me llamas, Christopher se ha estado quedando aquí unos días…
A Izan le daba igual las excusas de su tía.
—Como sea, esto sólo te lo voy a decir una vez, quiero a Liam fuera de la ciudad hoy mismo.
Isabella frunció el ceño confundida.
—Se enojaron o ¿Qué paso? No entiendo, cariño.
Izan dirigió su vista al señor Davis.
—Que bueno que esta aquí para que sepa que Liam ayer drogó a Amelie e
