La Reina Alfa y su Reino Rogue

CAPÍTULO TREINTA Y UNO

ELINA

En el camino a casa podía sentir las miradas de Camille perforar la parte lateral de mi cabeza, claramente ella vió lo que sucedió con Bastian en las escaleras e imagino lo que debe estar pensando en este momento, probablemente crea que me estoy dejando llevar por el efecto que él tiene en mí, y aunque tendría un poco de razón con ello, no lo estoy haciendo conscientemente, cambiaría lo que sucedió en el bosque y en las escaleras si pudiera, de hecho, cambiaría todo lo que ha sucedido desde que conocí a Bastian.

“¿Estás bien?” Camille me pregunta a través de un enlace mental, cuidando que el chofer, el cual es del reino Crimson, pueda escuchar lo que hablamos.

“Sí, ¿por qué lo preguntas?” le respondo.

“Bueno, no era mi intención hacerlo, pero ví lo que sucedió antes con el rey Vark,” ella me dice con culpa.

“Él claramente no conoce los límites, simplemente está intentando manipularme para que olvide lo que pasó,” le respondo y ella me mira con simpatía.

“Su beta dice que él es buena persona, sigue insistiendo en que todo esto es sólo un malentendido, e incluso me dijo que… bueno, es que no tiene sentido,” ella dice y yo frunzo el ceño.

“¿Qué te dijo August?” le pregunto.

“Ellos parecen creer que el Rey Zane está detrás de esto,” ella me dice y yo la miro con sorpresa.

“¿Qué?” pregunto de inmediato.

“Eso fue lo que él me dijo, bueno, no dijo exactamente eso, pero si empezó a hacerme preguntas sobre el rey y en un momento insinuó que deberíamos investigarlo a él también, ya que según ellos, el rey tiene los medios, el poder y la motivación para hacerlo,” ella me dice encogiéndose de hombros.

“Eso es absurdo, Zane nunca haría algo como eso, él me adora y también a los bebés, además ¿qué motivación podría tener para ello?” le respondo y ella asiente.

“Eso fue exactamente lo que le dije, que el rey Zane haría lo que fuera por ustedes, pero él no parecía muy convencido, dice que él quiere crear conflicto entre tú y el rey Vark para separarlos,” ella me responde y yo sacudo la cabeza.

“Bastian es capaz de cualquier cosa menos de admitir sus propios errores,” le digo y ella frunce los labios.

“¿Y qué tal si no fue ninguno de los dos?” ella pregunta, más para sí misma que para mí.

“¿A qué te refieres?” le pregunto.

“Tiene sentido que sea alguien con poder y los medios para crear este conflicto, así que tal vez deberíamos investigar a las personas poderosas que puedan tener algún motivo para una guerra entre los dos reinos,” ella responde.

“Eso tiene sentido, ¿pero a quién podríamos investigar?” respondo.

“Bueno, es de suponer que ambos reinos tienen enemigos, incluso nuestro reino rogue también tiene enemigos, deberíamos empezar por ellos,” Camille me dice y yo asiento en acuerdo.

“Pero, no le digas nada de esto a nadie,” le digo y ella asiente.

Así que continuamos el resto del camino discutiendo otro tipo de cosas con Camille, y aunque el plan inicial era ir directamente al palacio Crimson, le pido al conductor que se desvíe del camino para ir al castillo Rogue y hablar con mi madre sobre la pregunta que me lleva dando vueltas en la cabeza desde que hablé con Bastian en el bosque.

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“Honestamente, cariño, sí suena como a algo que tu papá haría,” ella me responde con tristeza después de que yo le he contado todo lo que Bastian me dijo.

“¿Qué? ¿De verdad crees eso?” le pregunto con sorpresa.

“Tienes que entender que él probablemente estaba bajo mucho estrés y la presión de salvar a Marcus de algo en lo que él lo había metido, además, aunque él estuvo hablando con tu tío por meses, nunca se discutió nada más que no fuera tu salida del reino, no había forma en que pudiéramos estar seguros de que seríamos recibidos en el grupo que tu tío estaba formando, después de todo, éramos parte del reino Varkolak y eso para ellos era sinónimo de enemistad,” ella me dice y yo sacudo la cabeza.

“Pero no lo entiendo, él pudo haber elegido salvar su vida, ¿por qué no lo haría?” le pregunto.

“Si para salvar su vida debía ponernos a nosotros en una situación riesgosa y arrastrarnos con él a su exilio, entonces es más que obvio que él no lo haría, yo tampoco lo hubiese hecho,” ella me dice.

“Pero mírate ahora, tú y Elijah están con el ejército rojo en donde fueron acogidos como miembros de nuestra comunidad, nada malo les hubiese sucedido si escogía el exilio,” yo le digo.

“No teníamos forma de saber esto en ese momento, Ellie, además, sabes que la única razón por la que nos aceptaron con los brazos abiertos fue porque tú ya eras parte importante del ejército rojo y les pediste hacerlo, si hubiésemos venido aquí antes que tú es probable que nos hubiesen echado a patadas y habríamos quedado todos desamparados en el bosque, sin más remedio que volvernos rogue,” ella me dice y yo frunzo el ceño.

“No te estoy diciendo que lo que ese hombre te dijo sea cierto, porque no tengo forma de saberlo, tu padre no mencionó nada al respecto cuando se despidió de nosotros, pero sí que es muy probable que él haya tomado esa decisión,” ella me dice y yo siento que mi cabeza cada vez está más confundida.

No obstante, viendo lo mucho que esta conversación la está afectando, y el hecho de que mis bebés ya debieron haber llegado al castillo junto con la niñera y el resto de mis guerreros, me despido de mi madre y le pido una vez más que venga a vivir al palacio conmigo, pero ella nuevamente se rehúsa, pues no quiere separarse de Elijah quien ahora está ocupando un rol importante en el ejército rojo.

Tan pronto llego al palacio Crimson, paso primero a ver a los bebés en su habitación en donde están con la niñera, y después voy en búsqueda de Zane para discutir algunos asuntos que quedaron pendientes antes de que me fuera, no obstante, al llegar a su oficina y entrar sin anunciarme, como siempre lo he hecho desde que nos casamos, me encuentro con una escena bastante peculiar frente a mí.

Zane está sentado en la silla tras su escritorio, mientras que una rubia de piernas largas está sentada encima del escritorio acercándose demasiado a él mientras le habla con una sonrisa coqueta en sus labios rojos.