El día iniciaba y la luz del sol se asomaba entre las cortinas oscuras, Edie se encontraba aferrado al cuerpo de Eric como lo hacía todas las noches. El calor corporal había acabado y por fin se sentía aliviado de esa gran necesidad continúa, pero aun así se mantenía con la necesidad de tener a Eric a su lado.
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No quiero abrir mis ojos, se siente tan bien estar en brazos de Eric, estos momentos quiero que sean eternos. Hoy inicio la universidad y siento un vacío en mi pecho al saber que tendré que estar lejos de él por muchas horas. Me aferro más fuerte a él haciendo que comenzara a despertar.
— Mmm bebé que sucede?
— No quiero ir... — Oh Dios, no puedo creer que me pondré a llorar por esto! Pero mis ojos pican.
— Amor, tú habías insistido mucho por volver. Además también ya
