Después de unos minutos en silencio, Nyx encontró una imagen que le llamó la atención. Unos arreglos con peonías blancas y lirios, simples pero elegantes, que contrastaban con las pesadas lámparas de cristal y la opulencia del salón. Ella sabía que Aleksei preferiría algo más sobrio, pero esto representaba una fusión entre su propio estilo y el de él. Algo que no resultara demasiado femenino, pero que aun así tuviera un toque de su personalidad. —Tú ganas, no habrá tulipanes. Creo que esto será perfecto —dijo, mostrándole la imagen a Dmitry. Él la miró durante unos segundos antes de asentir con un leve gesto de la cabeza. —No es… demasiado —dijo Dmitry con un asentimiento. Nyx sonrió un poco al escuchar su aprobación, aunque no fuera más que una evaluación técnica. Sabía que para Dmitr

