CAPITULO 3
Veo como Izan empieza a correr hacia mi mujer Laura. Todos sonreímos, menos Quique, que parece que no le hace mucha gracia verla o sigue asustado por lo que ha pasado hace unos momentos.
Empiezo a caminar más rápido hacia ella.
Al llegar a ella, la cojo de la cintura con la única mano que me queda libre. Veo como Ashier estira los brazos para cogerla, prefiere estar con ella que conmigo. Me separo de ella y me siento en uno de los bancos que hay en la estación. Bajo la cabeza.
Ella se pone delante de mi.
-Chicos sentaros allí - señala Laura los últimos bancos que hay en la estación. Izan enseguida hace caso. Quique a diferencia de su hermano se queda muy pegado a mi.
-Esta asustado, bajo del tren y empezaron a empujarlo, lo volví a perder de vista. Soy un padre horrible,
