El frío de las habitaciones de hospital no da clemencia, bueno se puede decir que no me gusta de a mucho ese clima y por eso me molesta un poco estar acá, pero al parecer últimamente debo estarlo. Las caras largas de mi familia, aunque traten de disimularlo, hacen alusión al gran momento que estamos viviendo, pero lo que más ha dolido es tener que estar lejos de Steve, era imperativo que asistiera a las reuniones en el lugar maravilloso que me describió, realmente si es bello, me lo ha mostrado en videos y fotos, casi todo el tiempo se comunica y me cuenta como va su día. Constantemente me repite lo mal que se siente por estar lejos y yo vuelvo a insistirle que las cosas por acá estarán bien, además tengo a mi familia al pendiente, hasta Lou hace su parte con Marcelo en casa, como siempr

