Steve se giró para buscarle rostro al comentario, con esa sensación de malestar en el aire. Quería detenerlo y seguir a la habitación, pero sería darle la razón a su duda y no se quedaría tan tranquilo al respecto. Al girarme con él, veo el rostro sonriente de Cris, mirando hacia el suelo, como siempre, en sus facciones se identificaba la malicia, le gustaba retar el momento, solo espero que no quiera ahora sincerarse también.
- ¡Ah! - Fingió sorpresa, como si no supiera que Steve estaba en el mismo lugar - Hola ¿cómo estás?
Steve arrugo su frente y su rostro ahora, más enojado que nunca.
- Bien, gracias. ¿Vamos Mar? – Ahora posaba sus ojos sobre mí, sentí algo de temor, como si leyera mi mente.
- Si vamos amor.
Adoro, que haya preferido cortar el tema y no armar
