Ha pasado una semana, después de nuestro último encuentro y no he tenido información de él, aunque tampoco he intentado llamarle, teniendo en cuenta que cada número del que se ha comunicado, ha sido diferente y en la mayoría de los casos, privado.
Claro que lo pienso a diario, en cada momento que escucho una canción alusiva a lo que siento, últimamente me mata la de Arjona, Sin Daños a Terceros.
“Maldita sea la hora, que encontré lo que soñé, tarde”.
Pienso, pienso y pienso. Le doy vueltas a mi cabeza, desarmo las opciones, alego con los argumentos, peleo con mis deseos, pero siempre, siempre, la conclusión es la misma. No hay nada que hacer, más que confirmar, que llegué tarde a la cita con el amor, de mi vida. Tal vez si él tuviera pareja, no doliera tanto la situación, mi mente o m
