Obsesión Irresistible

Capítulo 3||

Leah Johnson

—Mierda, joder... ¿Qué diablos sucedió anoche? —Escucho a Logan exclamar por lo cual abro los ojos lentamente, al parecer no recuerda nada de anoche a diferencia de mi que lo tengo bastante claro y grabado en mi mente, lo recuerdo todo perfectamente y aunque debería sentirme arrepentida, no lo estoy. Lo miro y la preocupación y desesperación brillan en su rostro. —Demonios Leah, dime que no  hicimos lo que creo por favor. —Vuelve a exclamar escandalizado.

—Cierra la boca j***r, me duele mucho la cabeza. Y claro que follamos ¿por que si no estaríamos desnudos? Es más recién en la madrugada te saliste de mí. —Le digo y me mira completamente aterrado.

—Maldita sea, ¿Usamos protección al menos? —Pregunta y inmediatamente recuerdo que debo beber anticonceptivos.

—No.

—¿¡No!? Estas putamente loca Leah, ¿¡Cómo pudiste si quiera permitir aquello!? —Me grita encabronado. Me muevo en la cama hasta él y cubro su boca con mi mano justo como lo hizo el conmigo anoche.

—Deja de gritar, si Nial te escucha estaremos acabados. Además anoche no estuviste quejándote, sin contar el hecho de que fuiste tu él que vino hasta aquí. —Le recuerdo, se pasa la mano por el rostro tres veces seguidas y me mira de nuevo.

—Tienes que tomarte las pastillas. No podemos correr el riesgo de que salgas embarazada, Nial me mataría. —Me dice más calmado. Ruedo mis ojos y asiento.

—Iré a darme una ducha. Tu procura salir de aquí sin que nadie te vea. —Le digo y me paro de la cama, arrastro las sabanas descubriéndolo a él y cubriendo mi cuerpo. Le miro su torso y luego su polla, la cual la trae erecta, se da cuenta y se cubre en seguida.

—¿Qué haces? Deja de verme así. A no ser que quieras que te folle otra vez. —Dice y me río.

—Tal vez. —Respondo y este levanta una de sus cejas.

—Estas putamente loca. —Replica pasando su mano por su rostro otra vez.

No le replico, ni le contesto nada y salgo de la habitación para entrar al baño, hago mis necesidades, me ducho, cepillo mis dientes y salgo envuelta con una de mis toallas.

Ni Logan ni su ropa están aquí por lo cual suspiro aliviada, tomo una falda lisa negra de cuero, un abrigo azul y mis botas negras, me los coloco, luego suelto mi pelo y me pongo algo de pintalabio rosa claro.

Bajo las escaleras lentamente y escucho las voces de Mia y Ava, cuando entro en el comedor todos excepto mi hermano y Maya están desayunando.

—Buenos días Leah. —Me saluda Ava, no respondo y solo me limito a sonreír a modo de saludo.

Hunter me mira con el ceño fruncido y los ojos entornados mientras que Logan me observa curioso, Mia con odio y Ava sonríe.

Me siento en la mesa apartada de todos, tomo una tostada junto con huevos y un poco del jugo de naranja. Comienzo a comer sin prestar atención a mi alrededor hasta que entran Nial y Maya tomados de las manos.

—Buenos días chicos. —Saluda Maya, todos le sonríen y saludan. Yo permanezco comiendo sin levantar mi rostro. No quiero ver y mucho menos tener que hablar con Nial ahora.

—Estábamos pensando que ahora que somos libre, bueno hasta que empecemos a trabajar claro. El fin es que Nial y yo queremos hacer un viaje de por lo menos una semana a Londres, tenemos una casa cerca de la playa allá, ¿Os gustaría ir? —Pregunta Maya amablemente.

—Claro. —Acepta Mia.

—Sí, siempre y cuando mi amor este de acuerdo. —Dice Ava, desvío la mirada y ruedo los ojos sin que ninguno me vea.

—Iré. —Asiente Hunter y Ava le besa la mejilla tiernamente.

—¿Logan? ¿Leah? —Nos llama Maya y la miro de inmediato.

—¿Ah? Sí, claro. —Concuerdo nerviosa. El que nos haya llamado a ambos me puso a mil.

—¿Y tu Logan, estas de acuerdo? —Él solo asiente. —¿Sucede algo? ¿Por qué estas tan callado? no es normal en ti. —Le pregunta Nial y yo me atraganto con el jugo de naranja que justo estaba bebiendo en ese momento. Todos me miran curiosos excepto él que rueda sus ojos y se ríe, idiota.

—¿Estas bien, Leah? —Me pregunta Ava.

—Sí, lo siento. Yo...yo voy a mi habitación. —Respondo atropelladamente lo que hace que me miren más extrañados.

Me paro sin esperar que asientan o opinen algo. Subo directo a mi habitación y me apoyo en la puerta luego de cerrarla. Respiro hondo una y otra vez hasta que logro tranquilizarme.

Luego de una media hora alguien toca mi puerta, me asusta el solo hecho de pensar que se trate de Logan, no quiero que Nial me vea con él, no quiero que sospeche nada. La abro e intento volver a cerrarla cuando veo su rostro pero él es más rápido y entra.

—No te comportes como una cría Leah. —Me dice y lo miro incrédula.

—Pues es justo así como me tratas Nial. —Replico.

—No quiero discutir sobre eso ahora. Solo vine a avisarte que llevaré a Maya a su casa y dejaré a Logan en el mecánico. —Me dice.

—No veo la necesidad que tengas de avisarme. —Espeto y me mira cabreado.

—Llevaré a Mia y Ava igual. —Vuelve a decir y frunzo el ceño.

—¿Y eso por qué?

—Hunter y yo tenemos unos papeles que llenar, probablemente empecemos a trabajar en dos semanas, en la empresa de papá al igual que tu. —Lo había olvidado, Hunter es muy bueno en financiamiento por lo cual mi padre se ofreció a darle trabajo con un buen pago. La familia de Hunter tiene una empresa igual pero según él no quiere que lo traten como jefe allí por el simple hecho de ser hijo del señor Brown.

—Bien, me da igual.

—No salgas de aquí hasta que llegue. —Me dice y levanto una de mis cejas.

—¿Y eso por qué? —Vuelvo a repetir.

—Mamá y papá no están aquí, confío en Hunter pero después de todo es un hombre. —Expresa con seriedad.

—¿Crees que me le iré a ofrecer o qué? —Pregunto indignada, estoy como una cabra pero el no tiene por que tratarme así.

—Solo has lo que te digo. —Me ordena y sale.

Es extraño y estúpido... Hunter también podría llevar a Ava y Mia, y luego volver ¿Por qué tiene qué quedarse?