Leah Jhonson
Deslizo mis manos una y otra vez sobre la tela fina, deshaciendo las pequeñas arrugas que se forman en la falda negra que me traigo puesta, cada que camino, a pesar de que la han planchado en la lavandería no ha dejado de arrugarse y subirse por mis muslos desde que me la coloque. Ajusto la chaqueta sobre la blusa color vino y me apresuro a llegar a la sala de juntas.
Mi cabeza es todo un manojo de nervios y recuerdos que me están volviéndome putamente loca, j***r. Creer que después de follarme a Hunter iba a pasar factura fue una gran equivocación de mi parte, los últimos dos días después de lo sucedido, no he hecho más que pensar en ello, en él... Dios, si que estoy jodida.
Me apresuro a entrar en el ascensor cuando lo veo a punto de cerrarse, entro y las dos chicas en el
