Valerie y Alejandro se despertaron temprano, listos para enfrentar el día y los preparativos finales de su boda. A pesar de los nervios y las preocupaciones, ambos estaban decididos a hacer de su boda un día inolvidable. Los dos estaban contentos. Sin embargo, habían días en los que se sentían agotados. Planificar una boda resultaba más estresante de lo pensado. Además, Alejandro como figura pública tenía toda la atención de la prensa sobre el. Por lo que le resultaba aun más agobiante. Pero, eso no era suficiente para amedrentarlo. Estaba decidido a casarse con Valerie. Alejandro se levantó primero, acariciando suavemente el cabello de Valerie antes de levantarse de la cama para que está también se levantará. El hombre se dirigió al baño y se dio una ducha, en lo que su mujer se leva

