Sarah
Melissa, siempre hace todo lo posible por llamar la atención, con ese aire superior y buena chica, pero no me engaña. A pesar de que conseguí que Rafael se casara conmigo, logré mi objetivo finalmente, ella logra superarme, sin ningún esfuerzo, simplemente lo hace, y eso me ha irritado desde que éramos pequeñas.
Melissa era la niña perfecta, la hija mayor y yo siempre tenía que esforzarme más para llamar la atención de mis padres y de todos los demás. Siempre tratando de alcanzarla y siempre lo tenía todo sin ningún esfuerzo.
Ella era naturalmente hermosa, no necesitaba nada para resaltar su apariencia, siempre tan pura y casta, todos se arrojaban a sus pies. Todos querían ser sus amigos.
Después de unos años comencé a inventar muchas historias sobre ella, todo corrió como la pól
