el inicio

3225 Words
Chicago. Illinois año 1.990 Un joven de nombre Will Cleane, excelente estudiante, proveniente de una familia pudiente, sus padres siempre le inculcaron la humildad y respeto hacia los demás, se acreditaba con una beca para estudiar medicina en una de las mejores universidades del país y del mundo entero, Will siempre tuvo claro lo que quería ser de grande, un médico cirujano con especialización en cardiología y su sueño se haría realidad si lograba terminar la universidad, algo que Will sabía que lograría pues siempre había sido estricto consigo mismo para los estudios. —Will hijo, ven siéntate quiero conversar contigo— Decia el Sr Willam Cleane, padre del joven Will. —En seguida voy padre— Respondía el joven Will mientras tomaba un poco de agua. —Hijo quiero felicitarte por esta beca que has logrado obtener, me siento orgulloso de tí y quiero desearte mucha suerte en tus pasos a seguir— —Gracias padre, me siento afortunado de haber conseguido esta beca, prometo que jamás te defraudare a ti o a mi madre, siempre daré lo mejor de mí, así como siempre me lo has enseñado padre— —Se que así será, estoy seguro de que lograrás todo lo que te propongas, pero quiero que siempre recuerdes algo hijo, jamás debes perder la humildad, ten presente eso, quien pierde la humildad pierde el sentido de la vida y la prepotencia tarde o temprano se paga, así que cuando tengas éxito siempre cuídate de no ser prepotente— —Asi será padre, jamás perderé mi humildad, siempre seré el mismo Will, te lo prometo padre— —Entonces no tengo más nada que decir, solo desearte suerte en tu camino hijo mío— Decía el Sr Willam mientras se ponía de pie para darle un abrazo a su hijo. Llegó el día y Will se marcha desde Chicago hasta Cambridge, Massachusetts lugar donde estaba situada su nueva casa de estudios La Universidad De Harvard, Will pasaría cuatro años estudiando para graduarse de médico cirujano y dos años para hacer su especialización en cardiología, el primer día en que llegó a esta universidad Will conoció a Chris Pratt quien sería su compañero de habitación y también su compañero de estudios. —Hola buenos días ¿como estas? Mi nombre es Will Cleane y creo que seré tu compañero de habitación— Decía Will presentándose y estirando su mano como señal de saludo. —Hola, muy bien, es todo un gusto yo soy Chris Pratt ¿tu como estas? Y si por lo visto seremos compañeros de habitación— Respondía Chris estrechando la mano de Will. —Muy bien, la verdad me siento estupendo de estar aquí, voy a estudiar medicina ¿que estudiaras tu?— —Yo también me siento sensacional de estar aqui y que buena noticia yo también estudiare medicina, seremos también compañeros de clases— —Oye que genial, creo que nos haremos buenos amigos y ¿de donde vienes tú?— —Si ya lo creo, yo vengo de Chicago y ¿tu de donde vienes?— —¿Que es en serio? Yo también vengo de Chicago, que coincidencia— —Vaya si que lo es, definitivamente seremos muy buenos amigos— —Si estoy seguro de eso— Decia Will sonriendo y colocando su maleta en su nueva cama. Pasado casi un año Will y Chris se habían convertido en grandes amigos y no sólo eso, también se habían convertido en los mejores estudiantes de medicina de su año, ambos amaban la medicina y ambos querían ser grandes cardiólogos, tenían una sana rivalidad entre ellos con respecto a su carrera, pero lo cierto era que ambos llevaban calificaciones iguales, la única diferencia entre ellos era que Will era más estricto consigo mismo, pero ambos apuntaban a ser unos grandes cirujanos. Un día los estudiantes de último año de medicina realizaron una pequeña fiesta en su fraternidad, fiesta a la que por supuesto Will y Chris asistieron, en esta fiesta Will conoció a una hermosa y simpática chica estudiante del segundo año de derecho empresarial de nombre Taylor Lautner, Taylor y Will quedaron conectados a penas se vieron por primera vez y fue gracias a Chris que éste par se lograron conocer. —Vaya Chris viste a esa chicha, viste lo hermosa que ella es— Le comentaba Will a Chris mientras tomaban un vaso de cóctel. —¿Cual chica? No e visto a ninguna chica— Respondía Chris de manera curiosa en saber a qué chica se refería su amigo. —Esa que está allá en aquel grupo de chicas ¿la vez? la que tiene la chaqueta de cuero— —Si ya la veo, vaya es realmente hermosa Will y creo que te está viendo amigo— —¿Tu crees? No de seguro es otra de tus malas bromas— —Demonios Will no, te lo juro amigo creo que te estaba viendo, observa, mira alli está te miró de nuevo— —Rayos Chris tienes razon y ahora ¿que hago amigo?— —Pues no harás nada viejo, déjamelo todo a mi— Dijo Chris dirigiéndose hacia donde estaba este grupo de chicas. Will no creía lo que su alocado y mejor amigo estaba a punto de hacer, él iba directo a este grupo de chicas donde se encontraba la joven que había llamado su atención y mientras Will observaba esto, Chris se estaba presentando con las jóvenes. —Hola chicas como están, me llamó Chris Pratt y soy estudiante del segundo año de medicina mi amigo que está allá es un poco timido, pero la verdad es que nosotros estamos solos en esta fiesta y notamos que ustedes también están solas, así que pensábamos que quizás podríamos hacer un grupo y compartir ¿que les parece chicas?— Esto les decía Chris a las chicas muy picaramente, mientras señalaba a Will para que supieran quien era su amigo. Las jóvenes se pusieron de acuerdo y le dan un respuesta afirmativa a Chris, así que éste no dudo en hacerle una seña con sus manos a Will para indicarle que se dirigiera hacia donde se encontraban Chris y las chicas. —Acércate Will amigo, quiero presentarte a nuestras nuevas amigas, ellas son estudiantes de derecho empresarial— Le decía Chris a Will, mientras éste se acercaba al grupo algo apenado. —Hola chicas, es todo un gusto, mi nombre es Will Cleane— Decia Will presentándose con las jóvenes y estrechando la mano de cada una de ellas. Al pasar unos quince minutos Will ya se sentía un poco más en confianza y decidió ofrecerle un vaso de cóctel a esta chica que habia llamado su atención. —Hola de nuevo Taylor ¿es ese tu nombre cierto?— Preguntaba Will pasando si mano por su cabello. —Si Taylor, Taylor Lautner— Respondía Taylor mientras tomaba de su vaso con un pitillo y veía a o los ojos a Will. —¿Que tomas allí?— —Es solo un jugo de arándano— —¿Te gustaría tomar un vaso de cóctel conmigo? No está tan fuerte— —Si claro, vamos— —Gracias— —Y dime Will ¿tu también eres estudiante de medicina cierto?— —Si, soy estudiante del segundo año y la verdad es algo que me encanta y me apasiona, así como de seguro a ti te apasiona tu carrera— —Si te entiendo perfectamente y si estás en lo correcto, desde niña quise estudiar ésto pues mi padre es un gran abogado de Nueva York y es mi ejemplo a seguir— —Vaya que bueno, en mi familia seré el primer cirujano, toda mi familia se a dedicado a los vienes y raíces, pero la verdad eso no es lo mío— —Te entiendo eres un innovador, quieres hacer algo distinto a lo rutinario, eso me gusta— —Si, la verdad me gustaría llegar a ser el mejor cirujano del país, o al menos de mi estado— —Creo que lo, lograrás tienes pasión y eso es bueno— —Si eso creo, la verdad es que la medicina es mi motor, sabes me gusta ayudar a las personas y creo que eso también me ayudará a llegar lejos— —Si, definitivamente eso te llevará lejos— —Y cuéntame de ti ¿tienes algún pretendiente?— —Oye, que acaso ¿tú no eras el tímido aquí?— —Lo soy, pero es que la verdad contigo no siento timidez alguna— —Si claro lo entiendo, y pues la verdad no, llevo más de un año soltera desde que comencé la universidad, la verdad no había tenido cabeza para eso— —Es bueno saberlo— —Y por que dices eso ¿por que es bueno que sepas eso?— —Ah pues no por nada, solo por si algún día quisiera invitarte a salir ya sabría que podría hacerlo— —¿Si lo crees? Pero una cosa es que tu me invites a salir y otra muy distinta es que yo acepte— —Si, tienes toda la razón, pero supongamos que te invitará a salir la próxima semana ¿cual sería tu respuesta?— —La verdad es que, creo que diría que sí, no todos los días se sale con uno de los mejores estudiantes de medicina de Harvard— —Y como tú sabes que yo soy uno de los mejores estudiantes de medicina de Harvard— —La verdad por que afuera de la fraternidad ví tu foto y la de tu amigo y leí que son los mejores estudiantes de todo el segundo año de medicina— —Vaya con que fue eso— —Si eso fue, así que no te preocupes que si me gustaría salir contigo— —Entonces tenemos una cita la próxima semana— —Si por supuesto— —Genial— Decía Will tras escuchar esta respuesta, tomando un trago de su cóctel. Esa noche Will y Taylor siguieron compartiendo hasta que la fiesta llegó a su fin, ella se retiró a su fraternidad con sus compañeras, mientras que el se quedó en su fraternidad y se fue a dormir a su habitación, pero para su sorpresa al llegar a la habitación Chris se encontraba teniendo sexo con Clher una de las compañeras de Taylor, algo que no dejo dormir a Will pues tuvo que salir de la habitación. A la mañana siguiente Chris invita a desayunar a Will como un gesto de agradecimiento por dejarlo solo con la chica en su habitación y mientras desayunan Chris no perdió el tiempo y le preguntó sobre su conversación con Taylor. —Hey amigo que noche tan alocada no lo crees— Decía Chris tomando una taza de café. —Alocada para ti amigo, para mi todo marchó bien hasta que me tocó quedarme afuera de la habitación— Respondía Will mientras comía una manzana. —Hermano lo siento, pero no podía perder esa oportunidad, tu viste a esa chica por Dios era ardiente— —Si bueno ya que, no importa viejo— —¿Y tú? a que llegaste con esta chicha, Taylor era su nombre cierto— —Saldremos la próxima semana, tendremos una cita, ella nos conocía vio nuestra foto afuera de la fraternidad— —¿En serio? vaya somos famosos hermano— —Pues tu fama se perderá si no apruebas el exámen de esta tarde— —Demonios viejo, no lo recordaba voy a terminar de desayunar y me iré a estudiar, aún tengo tiempo— —Pues si te das prisa si, de algo me sirvió quedarme afuera de la habitación, aproveche esas horas para estudiar— —Rayos Will, bueno no importa ese exámen lo voy a pasar dalo por hecho— —Por tu bien espero que así sea amigo mio— Decía Will levantándose de su silla. Ese mismo día y luego de aquel exámen, Will decide ir a la fraternidad de derecho para saludar a Taylor y luego de unos minutos caminando por fin la encuentra. —Hola chica abogado— Decía Will saludando por la espalda a Taylor. —Hola chico doctor ¿como estas?— Respondía Taylor un poco sorprendida de ver a Will allí. —Ah pues yo bien, algo agotado, acabo de tener un exámen ¿tu como estas?— —Que bueno, yo también tuve un exámen hace un momento, yo bien con algo de sueño, pero bien— —Me alegra saber que estás bien, yo iba a mi habitación, pero quise venir hasta acá para saludarte— —Vaya que caballero eres, me gusta eso de ti, gracias por querer saber cómo estoy y por venir hasta acá a saludarme— —No tienes por que agradecerme nada, la verdad es que tu despertaste algo en mi que no sabía que existía y bueno lo cierto es que desde anoche no dejo de pensar en ti— —Sabes algo Will, a mi me pasa exactamente lo mismo, pero por favor no, nos apresuremos y llevemos todo con calma ¿te parece?— —Me parece muy bien Taylor, hagamos algo, veámonos la próxima semana para nuestra cita y así vemos cómo marchan las cosas y si realmente lo que estamos sintiendo es real— —De acuerdo Will, me parece una muy buena idea— —Perfecto, entonces me retiro, fue un gusto saludarte y saber que estás bien, hasta la próxima semana— Decía Will retirándose, pero no sin antes darle un abrazo y un beso en la mejilla a Taylor. Pasaron los días y por fin los chicos tuvieron su primera cita en la cual hablaron sobre sus vidas, sus estudios en la preparatoria y asi pues compartieron un almuerzo, un café y un helado, para luego volver a la universidad tomados de la mano, era un hecho el amor los habría atrapado. Poco a poco fueron pasando los años y los chicos fueron fortaleciendo su relación, la primero en graduarse fue Taylor y al hacerlo viajo a Nueva York por un tiempo para cumplir sus pasantías, pero volvería para mudarse a Chicago a penas Will terminará su carrera. Pasado un año Will por fin se graduó como médico cirujano especializado en el área de cardiología fue graduado con honores y a su lado estaba su mejor amigo Chris, quien también se graduó en la misma área, estos chicos viajaron a su ciudad natal para trabajar e ir tomando experiencia en su rama de la medicina y ambos entraron en el Mount Sinai Hospital Cardiology, este era uno de los mejores hospitales de cardiología del país y se encontraba en Chicago, ciudad de donde eran estos dos amigos, Taylor quien llevaba un año de graduada ya contaba con algo de experiencia y gracias a las influencias de su padre pudo entrar en uno de los mejores bufé de esta ciudad, se mudó aquí tras comprometerse en matrimonio con Will. Transcurrido un año por fin Taylor y Will se casan, eran realmente felices y ambos tenían lo que toda su vida habían deseado una persona amorosa a su lado, una carrera exitosa, una casa bonita y prestigio. —Vaya quien diría cariño que lograríamos llegar tan lejos y aún esto no es ni la mitad de lo que vamos a tener, esto es solo el principio— Le decía Will a su esposa una mañana en su desayuno. —Si amor mío, sabes siempre soñé todo esto, pero soñarlo no es tan sencillo como mantenerlo yo te amo Will y quiero estar siempre a tu lado— Respondía de esta manera Taylor mientras tomaba la mano de Will. —Yo también te amo cariño y quiero estar a tu lado el resto de mi vida— —Will debo decirte algo cariño, estoy embarazada— —¿Que? ¿es en serio mi amor?— —Si Will estoy embarazada, tengo 10 semanas ya me hice la prueba— —No lo puedo creer mi amor que excelente noticia estoy tan feliz, ya quiero verlo, tenerlo en mis brazos, besarlo, se llamará Marti si es niño— —Aun no se el sexo amor, pero solo le pido a Dios que nazca sano o sana— —Si eso es lo realmente importante mi amor— —Estoy tan feliz Will— —Y yo también Taylor, yo también me siento feliz, te amo y amo a ese bebé que viene en camino— Decía el Dr Cleane mientras le daba un abrazo a su esposa Taylor. Así pues pasaron los meses y el embarazo fue avanzando, mientras Taylor se encontraba trabajando desde casa y guardando reposo, Will seguía en el hospital trabajando y al mismo tiempo estudiando para actualizar sus conocimientos y cada día ser mejor doctor. El día en que nació su hijo Marti el Dr Cleane no estuvo presente, pues ese día tuvo una cirugía que le llevó más de ocho horas y cuando llegó al hospital donde se encontraba su esposa ya su hijo había nacido, así igual pasó con el primer año de Marti, el Dr Cleane no llego a su fiesta por que estaba ocupado con una cirugía, Will se perdía momentos importantes de su familia por atender otros asuntos en el hospital, cuando Marti estaba cerca de su segundo cumpleaños Taylor quedó nuevamente embarazada, esta vez de una niña. El gran Dr Will Cleane estaba siendo reconocido como uno de los mejores cirujano cardiovasculares de todo el estado de Illinois, pero en su casa era un hombre descuidado con su familia y tubo una gran discusión con su esposa por esta razón. —Will necesitamos hablar, ya no puedo seguir así, o tu cambias o sencillamente dejamos esta relación hasta aquí, pero no puedo entender como tú carrera y tu trabajo sean más importante que tu familia, tienes un hijo al que no vez, a mi ya casi ni me tocas y tienes una hija en camino por la cual ni siquiera me preguntas— Decía la señora Taylor bastante enfadada moviendo sus manos al hablar. —Cariño perdóname tienes toda la razón, no tengo palabras para disculparme, por favor te pido que me perdones yo voy a cambiar, te lo prometo— Respondía el Dr Cleane bastante triste y con su voz quebrada. Pero la realidad fue muy distinta a lo que prometió, el Dr Will Cleane con el pasar de los años si fue cambiando, el detalle fue que cambió para mal, en todo el estado era reconocido como el mejor cardiólogo, tenía un gran prestigio, llegó a ser el director del Mount Sinai Hospital Cardiology y junto a el también era reconocido su amigo de la universidad Chris Pratt quien llegó a ser el encargado del área administrativa de este mismo hospital, pero todo este logro lo habría cambiado, lejos había quedado aquel joven humilde e interesado en ayudar a las personas, tenía una familia a la cual no le prestaba atención y una aventura con una enfermera del hospital, pero la vida de Will estaría a punto de cambiar tan drásticamente que todo lo que había construido tras estos largos años, se derrumbaria tan rápido con el efecto dominó...
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