Una Guía y Dos Esper

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El Poder De Seth Starlight

Noah estaba preparando el desayuno en la cocina de la unidad familiar mientras Zack leía un libro en el sofá cuando el sonido de alerta en la puerta atrajo su atención.

- ¿Esperamos a alguien? - le preguntó a su hermano quien negó con la cabeza antes de levantarse e ir a la puerta.

Cuando abrió, Kevin, el encargado de seguridad de Seth lo saludó con formalidad.

- Buenos días, Esper Grant. - le dijo haciendo un gesto para que varios guías y esper entraran con cajas y bolsas a la estancia

- Hey, Kevin ¿Qué es esto? La unidad de tu jefe está al lado. - le dijo Zack confundido al ver como las cajas se apilaban antes de que los otros metahumanos salieran.

- Estos son obsequios de la pareja Starlight por su reciente unión, señores Grant. Además se incluyó ropa Norm para la salida que tendrán esta tarde.

Noah se acercó a su hermano con curiosidad al ver la cantidad de paquetes.

- ¿Todo esto es para nosotros? - preguntó sorprendido.

- A Seth le gusta hacer todo a lo grande. - le dijo su hermano arrugando la nariz - Te acostumbrarás.

- La señora Anthea dijo que los colores respetan el de sus uniformes para que la Guía Petrovich no se ponga ansiosa. - agregó con una sonrisa.

- Dile que se lo agradecemos. - le dijo Zack masajeando el puente de la nariz. Tratar de regresarlo sería inútil. Conocía a Seth.

- Vendré a avisarles cuando los vehículos estén listos para salir.

- Gracias, Kevin. - le dijo el esper cuando salió del lugar.

Noah se acercó y revisó los paquetes. Dos porta ternos con el nombre de cada uno con trajes negros, cajas con zapatos, camisas y accesorios. Se giró a ver a su hermano.

- Son totalmente de mi estilo y del tuyo. También las tallas ¿Cómo?

- No preguntes. No lo sé. Su lado Norm me da miedo.

- En el ejército escuché que tiene mucho dinero y es presidente de Starlight Industries.

- Es cierto... y por eso admiro que tenga un perfil bajo cuando está en la Cúpula o los domos cuando viste como nosotros.

Zack se acercó a las cajas con su nombre y revisó el contenido para luego reir bajo.

- El bastardo sabe lo que me gusta...

Cuando iba a revisar otra una pequeña caja llamó su atención "Esposos" decía el sobre que le acompañaba y se la enseñó a Noah quien esperó a que la abriera. Ambos abrieron la boca asombrados cuando vieron tres anillos: Dos grises grabados con el nombre de Cyzarine y el n***o con grabado con los nombres de ambos.

- Son hermosos... - dijo Noah conmovido mientras Zack leía la nota que le acompañaba.

"Es el mismo diseño que tenemos nosotros" decía con letra de Seth "Llévenlos con orgullo. Por su esposa"

Noah la leyó y sonrió.

- No pensé que era del tipo romántico. - reconoció.

- Es un poco quisquilloso con ese tema después de casarse con su guía sin que ella lo supiera. - se burló observando la expresión sorprendida de su hermano - En ese momento la tenía conmigo por órdenes de Cassis. La llevó a la Nación del Amor para pedirle la mano formalmente.

- ¿Noah? ¿Zack? - Rin se detuvo algo aturdida en la puerta sin entender la situación y los jóvenes se giraron para observarla envuelta en la sábana y fue imposible no hacer reaccionar su cuerpo en su entre pierna.

- Hola, cariño... - dijo Noah abrazándola - Estábamos preparando el desayuno. No quisimos despertarte.

- ¿Que son esas cajas?

- Regalos de Seth y Anthea. - dijo Zack acercándose para besarla en los labios - ¿Tienes hambre?

- Si...- dijo adormilada, haciéndoles sonreir.

Su esposa disfrutaba comer.

- Terminaré en un momento. - dijo Noah caminando a la cocina - Zack, pon cubiertos.

Después de dejar a Rin sentada en la banca frente al mesón de la cocina americana, Zack caminó hacia los cajones quedando de pie junto a su hermano y Rin observó sus espaldas en silencio. El día anterior habían firmado el certificado de unión como pareja y legalmente se habían convertido en sus esposos y compañeros. Estaba demasiado aturdida como para reaccionar cuando ambos la eligieron después de convertirse en fénix.

La elección de seguir siendo compañeros o terminar la conexión era exclusiva de los esper. Era el poder que se les confería por sobre los guías quienes los estabilizaban debido a su necesidad de cercanía y control. Ningun guía podía negarse a la decisión del esper con el que se habían vinculado para el entrenamiento si, al convertirse en fénix, éste los elegía.

Aún le dolía que le hubiesen ocultado su habilidad para comunicarse entre ellos.

Se suponía que el vínculo se basaba en la confianza.

- Íbamos a decírtelo. - dijo Noah revolviendo la sarten con los huevos sin mirarla - Comenzamos a sentirlo horas después de la sincronización que hizo Anthea.

- No he dicho nada... - dijo Rin sorprendida - No en voz alta

- Noah, leíste sus pensamientos. - avisó Zack.

- Podemos leerlos... Cómo lo hicimos durante el implante ¿No lo recuerdas?

- Pude escuchar que planeaba irse y dije que no la dejaríamos ¿No lo dijo en voz alta? ¿Ella nos escuchó?

- Parece que sí...- miró de reojo a la joven que los observaba con suspicacia.

- Los dos, hablen ahora. - advirtió - ¿Pueden leer mis pensamientos?

- Si. - dijeron al mismo tiempo.

- Entonces cuando los escuché en mi cabeza... ¿También pueden hablarme?

-De eso no estamos seguros... - reconoció Noah acercándose a ella para servir la comida mientras Zack se sentaba a su lado frente a la joven - Creemos que si...

- Oh, esto es una locura. No son esper psíquicos.... - dijo Rin moviendo el tenedor inquieta.

- Al parecer no podemos hacerlo con otras personas. Sólo entre nosotros y nuestra esposa... - dijo Noah pensativo y Rin se sonrojó violentamente.

Zack se rio con suavidad al ver la reacción de su esposa y le hizo un gesto a su hermano.

- ¿Qué dije? ¿Fue algo malo? - le preguntó Noah sin entender.

- Sé que fue repentino, cariño. - dijo Zack tomando su mano libre - Pero ya lo habíamos decidido antes. No queremos a otra mujer para nosotros ¿Estás bien con eso? Sé que la intensidad del SICOM bajará al ser ambos fénix, pero creo que tenemos algo bueno entre nosotros ¿No lo crees?

- Imagina que tienes doble de amor, placer y cuidados que con un sólo esposo. Doble de todo. - dijo Noah divertido - Sé que estás abrumada aún, pero te aseguro que te cuidaremos y protegeremos con todo lo que tenemos. Eres nuestra familia. Nuestra Rin ¿Crees que podrás llegar a amarnos?

La joven los miró con una sonrisa suave.

- Los amé desde que los conocí. - les dijo con honestidad - No quisiera estar en los brazos de nadie más, pero estoy asustada. Si todo esto desaparece, no podría...

Los hermanos se levantaron con rapidez para abrazarla entre ambos y se apretaron contra ella. Los amaba y se los había dicho. La conexión vibró, sobrecogiéndolos y ambos habían querido demostrárselo.

- No nos perderás. - dijo Noah - Vamos a cometer errores y a veces seremos unos idiotas, pero te aseguro que te amamos también. Zack aún se niega a darle ese nombre, pero sus estelas están bailando hacia tí ahora.

Su hermano se sonrojó observando sus manos. Era cierto. Sus estelas la habían buscado instintivamente. Eso jamás le había pasado con Cassis. Con Rin seguía aprendiendo cosas que nunca había visto y esperaba seguir mejorando a su lado para poder dejar esas sombras atrás.

- Sabes porque me resisto... - reclamó a su hermano. - Ese bastardo me dejó jodido.

- Tranquilo. - le dijo Rin acariciando su mejilla - Lo sé... No te presiones.

- Eres nuestra esposa, nuestra compañera. No dudes en que te pertenecemos y tu a nosotros. - le dijo con intensidad sacando la caja y mirando a su hermano quien asintió - No sabemos mucho de estás cosas y tal vez, no sea el lugar adecuado, pero queremos dártelo.

Zack abrió la caja y le mostró el contenido haciendo que Rin ahogara una exclamación de sorpresa, conmovida. Ambos hermanos se arrodillaron a cada lado y Noah sacó el anillo n***o para colocarlo en su dedo.

- Nuestra Rin. Siempre...

- Nuestra esposa y compañera... - terminó Zack.

La joven miró a los dos y tomó cada anillo con sus manos y los deslizó en sus dedos con su ayuda

- Mis esposos, mis compañeros, mis amores... - les dijo emocionada besando a cada uno antes de que los jóvenes la alzaran en brazos para llevarla de regreso al dormitorio.

Celebración

Después de hacerle el amor a su esposa, los dos jóvenes se prepararon para la salida del grupo. Se vistieron en el estudio para darle privacidad a Rin quien había quedado impresionada con el vestido gris plata con delicados bordados y zapatos a juego. Con expectación, se vistieron bromeando para aliviar la tensión.

- Parecemos adolescentes en la primera cita. - dijo Noah ajustando la chaqueta del traje n***o con una camisa a juego del mismo color. Aunque era un almuerzo, llevaban corbata lo que les hacía ver sexys y masculinos. Las colleras de sus camisas eran diferentes, verdes como sus ojos y otro set azul como los ojos de Rin y habían decidido combinarlas ya que Rin les pertenecía a ambos.

El traje de Noah era de color n***o, pero tenía una pequeña aplicación en la solapa de color gris para diferenciarse de su hermano. Con su altura sobre metro ochenta y sus cuerpos ejercitados parecían modelos masculinos de alguna marca importante.

Zack miró el anillo en su mano y luego el de su hermano y sonrió cuando la puerta se abrió y Rin se asomó para verlos. Llevaba el cabello parcialmente tomado hacia el costado con un vestido clásico. Ambos hombres tragaron saliva al ver a su esposa.

- ¿Podemos pedirle al Maestro que nos lleve a comprar más vestidos para Rin? - preguntó Noah.

- ¿No prefieres tenerla desnuda en nuestra cama? - se burló Zack.

- Si, pero también tenemos que sacarla a pasear, citas y eso.

- ¿Sabes hacer eso? - preguntó Zack con ojos bien abiertos.

- Estuve 9 años con Norm. Tuve que aprender para salir con chicas.

- De eso tendrás que enseñarme...- le dijo Zack - Mierda, vi la ropa interior que le envió Anthea. Recuérdame decirle a Seth que nos diga dónde la compra.

- No me digas. No la vi a propósito o si no, no habríamos salido de aquí. - le pidió.

- ¿Me veo bien? - les preguntó su esposa - No estoy acostumbrada a los vestidos.

- Te ves hermosa, cariño. - le dijo Zack besándola con rapidez - Sólo porque debemos salir pronto es que no te llevamos de regreso a la cama.

- Ustedes también se ven bien...- les dijo sonrojada - Demasiado bien....

Las estelas de llamada de Rin brotaron a su alrededor y fluyeron hacia los jóvenes haciéndoles jadear. Era tan estimulante como una caricia piel con piel.

- No hagas trampa, pequeña Rin. - advirtió Noah besándola a su vez - Quiero ver tu ropa interior y eso no me ayuda.

- Lo siento, no sé cómo...

- Nosotros si lo sabemos. - le dijo Noah divertido - Te gustan tus esposos.

Rin se sonrojó ante sus palabras y ambos la escoltaron a la estancia con amplias sonrisas cuando el sonido de la puerta los sorprendió.

- Vamos, cariño... - le dijo Zack saliendo de su pequeño lugar privado a la celebración de su unión.