En ese momento Anthony y Alexandra c
hicieron ruido con su garganta para llamar la atención de la pareja que estaba embelesada disfrutando de los besos.
— Ya todo está listo Arthur para éste pequeño agasajo preparado para formalizar el compromiso entre ustedes por los momentos— dijo Anthony con el ceño fruncido.
— Me parece bien queridos suegros— todo lo que se disponga estoy dispuesto a acatar, con tal de tener a ésta bella mujer en mi vida— dijo Arthur muy emocionado.
— Ya es tiempo que hagamos público éste compromiso— dijo Anthony— y yo prometo que mi hija será fiel a su palabra.
— No necesitas hacer promesas por mi, papá— dijo Diane muy sería— yo soy una mujer de palabra y Arthur tiene mi amor, mi corazón y después tendrá mi cuerpo.
— Eso para mí es suficiente mi pequeña— dijo
