La salida de la mansión fue algo revoltosa y muchos sirvientes susurraban la mala relación que había en la familia. Mientras Nasaniel ordenaba a los sirvientes callar y guardas silencio, Josep se levantó del suelo aún tambaleándose y empezó a reírse sin sentido, como un demente, dejando asombrada a su madre que todavía se encontraba arrodillada frente a él. - Hijo que te pasa, por qué te ríes así!! - Ay madre, no te das cuenta, mi hermanito a perdido la cordura. Siempre está buscando a una hermana imaginaria, y luego yo soy el loco. - Hermana?!! Pero qué dices!!? ¿Qué hermana? - La hermana que tiene metida en la cabeza, o me equivoco Nasaniel??! En cuanto Nasaniel sintio la mirada loca del joven Josep no tuvo más remedio que asentir con su cabeza. Sintió que si les daba la razón parar