Cuando Harry llegó al Althas del oeste nunca pensó en hacer amigos. Solo quería una vida normal. Su primera impresión fue acogedora. Al ser un Althas situado en el territorio de los humanos no había muchos conflictos y era muy tranquilo.
Todos fueron amables con él y le dieron la bienvenida. En su primera reunión con sus compañeros fue elogiado por sus méritos ya que era un piloto bastante joven. A sus 24 años ya tenía más vuelos completados que otros pilotos mucho más mayores. Para él fue un gran inicio.
De pronto en mitad de la reunión apareció un hombre. Era alto y con un cuerpo muy bien tonificado. Bástate guapo y desprendía un aura bastante hipnótica.
Era uno de los mejores pilotos que tenía ese Althas. Su nombre era Nicolás de Marco. Era un año mayor que él pero no lo aparentaba
