Una latina para Gong Yoo ( Completado )

Pasados un lapso de tiempo

Y no logró acoplarme a los cambios, pero como se dice que una mente ocupada, es la mejor manera de olvidar penas, así voy yo.

Estoy impartiendo clases de español tanto en la mañana, en la tarde a otro bloque y por la noche a otro grupo, y es cuando me pregunto, ¿Acaso no duerme esta gente? Ya me parece que no tiene un poco de vida aparte del trabajo, digo para j***r con novias o novios, con la familia, la querida, que sé yo, pasa que me están matando con su ritmo y su manera de ser, para mí está bien mañana y tarde, pero aquí como que no esperan un no por respuesta los jefes.

Stop, stop, wait me pleasse. Quiero trabajar si, por que me encanta ver la plata mía en mis manos.

Aha, también por que me gusta sentir esa sensación de que me lo gané la autosuficiencia que sentís y me gusta más usarla cuando sé que lo gané a pulso, pero no a este grado, terminar de impartir clases hasta las doce de la noche, de ahí que vaya en el camino, me aliste para meterme a la cama, ¿Cuánto tiempo creen ustedes que casaré a mis pestañas? Nada, casi nada, no, no no, a mi ya no me va gustando esto.

Y ¿que crees que dice el famoso dicho en nuestra América latina? A pues no se si también lo digan en Asia, pero, derechos que no se defienden, son derechos que se pierden.

Voy tantito a hablar con mi jefe inmediato, le hago una reverencia de los mil diablos y luego expongo mis quejas, ah pues son quejas ¿no?

Él me escucha con calma y me dice, está bien, ya veíamos la dificultad, pero la demanda era tal que utilizamos así tu tiempo, mis disculpas, dice y me extiende un cheque extra, ya mandé a buscar otra persona más para acoplar junto a ti y que no te desvanes mucho y tengas tu tiempo para descansar u otras cosas más. Lo dice con algo de picardía.

Después sin más el Sr. Min Sang me pregunta.

—Y ¿que tal la estás pasando aquí?

—¿Que te parece este país, supongo que sientes un gran cambio? —Dice mi jefe inmediato, yo le respondo.

—Pues hasta ahora, no he tenido la oportunidad de salir y conocer a cómo quisiera, el país claro, pero verdaderamente es un gran cambio lo que he encontrado aquí— Le argumento mi experiencia al Sr. Min. Él medio me sonríe y me dice.

—Ya llevas cuatro semanas aquí, ya sería hora que conocieras muchos lugares interesantes—dice, me mira y titubea por un momento y pregunta.

—¿Tienes novio?—Su pregunta me tomó fuera de base, como solemos referir cuando no esperas algo.

—Yo... —Me agarró como bala de cañón, no esperaba que él hiciera esa pregunta, pero para que decir mentiras, odio hacerlo, si digo la verdad que no tengo, creerá que me estoy lanzándome a él y que por lo tanto estoy interesada, y si digo que si tengo novio, sería una mentirosa, y estaría mintiéndome más que todo a mi misma. Que ganaría con eso, pienso.

—¡Sr. Min, no tengo novio, y no quiero tenerlo! No por ahora, el Sr. Min abre bien grande el cuenco de sus ojos, de por sí son medio cerrados, por que tiene unos lindos ojos rasgados.

—Jajajaja! —Se carcajea él, no entiendo por qué se ríe, pero solo me limito a observarlo.

Detiene su risa y un poco apenado me dice—Tenemos más cosas en común que cualquiera aquí— Dice—Yo viví desde mis 16 años en Estados Unidos, ahora volví acá, es mi país, están mis padres aquí y ya sabes, me acostumbré a la vida occidental bastante. Y...tampoco tengo novia—Con esta confesión, no estoy insinuando nada.

Solo es aclaración, por que si tuvieras novio, no podría intentar ser tu amigo siquiera, ya sabes, a tu novio no les gustaría eso.—Lo dice todo nervioso.

Me río de lo que acaba de decir él, y asiento con la cabeza, y después me pregunta.

—¿Por qué es que no quieres tener novio?—Yo quedo pensativa por unos minutos y luego respondo.

—"Por que no elijes enamorarte cuando así lo deseas, y no me he enamorado todavía? Jajaja, parece que mi corazón no se ha flechado por nadie— Explico como añorando a alguien en mis pensamientos.

—¡Wow! Dijiste algo muy profundo—dice—Yo tampoco me he enamorado de nadie, así como para quererla junto mi toda una vida— no se por qué solo pensé en mi amiga Olga. Me dije a mi misma, Olga, aquí está tú coreano.

—Quisiera hacer una petición—dice el Sr. Min.—Frunzo el ceño y digo—¿Si?—Me dice al ver mi gesto—No te alarmes, no soy un depravado, solo es un favor que quiero pedir.

—¡Sí! ¿para que soy buena?—Respondo.

—¿Serías tan amable de acompañarme a una cena benéfica? —Dice algo nervioso.

Su petición me tomó por sorpresa, como tonta repito sus palabras.

—¡Cena benéfica! ¿Como la altura de quienes llegarían allí? —Pregunto.

—Idols del K-pop, actores famosos, tan famosos como los que salen en dramas muy famosos —Me dice sonriendo conmigo.

—OK, vale, te acompañaré—E internamente pienso, hoy veré a Kim Nam Joom.

Me mira con ojos suplicantes, así que me dije, "que pierdo ir un rato a despabilarme, y de paso ver caras lindas y respirar un aire distinto.

—Iré—Dije y su rostro cambió a un semblante muy alegre.