Buscando a la Sirena

22

¿Dónde Estás?

- Aquí tiene señor Andreas...- le dijo una voz desconocida mientras le extendía un té en un vaso térmico.

El actor estaba sentado en su silla esperando su escena y la presencia de la joven morena lo sorprendió.

- Tania ¿Verdad? - le preguntó.

- Si. - le dijo contenta al darse cuenta que el hombre recordaba su nombre.

- ¿Por qué me lo entregas tú? ¿Dónde está Sei?

- Sei salió hace algunas horas. Creí que lo sabía... Me dijo que lo apoyara mientras ella no estaba. - le preguntó, confundida.

- Si, debo haberme traspapelado. - mintió recibiendo el vaso. No lo recordaba - Gracias.

Andreas frunció el ceño buscando su teléfono cuando la joven se alejó y revisó la mensajería. No había mensajes de la joven.

- "¿Dónde estás?" - le escribió y miró la pantalla esperando una respuesta.

Nada.

Volvió a escribir nuevamente y no hubo respuesta.

Cerró los ojos tratando de tranquilizar la ansiedad que lo estaba abrumando, respirando profundo.

Mierda, pensó.

Sudaba frío. Se estaba desestabilizando.

El actor marcó el número de la joven y la llamada cayó al buzón de voz.

En el apartamento de Andreas

Sei tatareaba una canción en la cocina mientras preparaba la comida para el actor. Ya había ordenado la alacena, el espacio de lavandería y sólo quedaba dejarle la comida porcionada en los contenedores.

Su celular estaba junto a su bolso sobre el sofá de la sala en modo silencio por lo que no vio la pantalla con la llamada de Andreas.

En el Foro de Grabación

- Selene... - pidió el joven cada vez más ansioso cuando las llamadas siguieron cayendo al buzón de voz acercando la mano a su rostro - Inicia búsqueda. Objetivo: Seirén Niniadis. Motivo: Asistente del Guía Carmichael.

- Localizando...- respondió la voz

- ¿Qué haces? - le preguntó Rin sobresaltándolo.

La guía estaba con los brazos en jarras sobre las caderas de pie frente a él con una expresión molesta.

- No es asunto tuyo... - desafió

- Estás usando a Selene para buscar a tu asistente. Eso sí es mi asunto. No puedes usarla para eso.

- Oh, vamos. - le dijo burlón - Todos la usan para cosas más tontas que esa...

- Puede que sí, pero estás en una misión y estás trabajando con el equipo de la G3 Allen y el Maestro. - le regañó.

- Relájate G2. No puedes ser tan estirada.

- ¿Disculpa?

La expresión de la joven se volvió peligrosa y Andreas se arrepintió de haberla tratado de manera irrespetuosa. Había olvidado que los guías tenían jerarquías y la guía frente a él, tenía mayor rango que el suyo. En el mundo Norm era una celebridad y todos lo atendían o buscaban como idol a quien admirar o seguir, pero cómo guía era de rango más bajo que la mujer frente a él.

- Lo siento. - se disculpó con rapidez sentándose derecho - Fui maleducado. Sólo la estaba buscando porque no sabía que había salido. Me preocupé.

- Me pidió permiso a mi cuando preparaba tu té. Dijo que te había avisado. - le dijo Rin consciente de que ella había cometido el error al no habérselo informado como Sei le pidió - Me disculpo por no decírtelo antes.

- Eso aclara todo... - dijo Andreas con una sonrisa diplomática.

- Objetivo localizado. - dijo Selene - Apartamentos villa Grace.

- Es mi casa... - dijo Andreas sorprendido.

- Supongo que fue a hacer tus mandados. - le dijo con calma, pero se puso tensa al observarlo - ¿Te sientes bien? - le preguntó con cuidado al ver sus ojos brillar y luego la escarcha aparecer en la piel de sus mejillas.

- Claro... - le dijo el joven sin darse cuenta de lo que pasaba.

- Vamos... - le dijo tomándolo de un brazo con rudeza para que la siguiera.

- ¡Oye! Tengo una escena.... - se quejó cuando Rin le echó una chaqueta sobre la cabeza en tanto caminaban hacia el salón de descanso de Seth.

- Cállate. - le dijo ansiosa - Tus habilidades están afuera.

- ¡¿?! ¡¿Qué?!

Andreas se puso rígido.

Rin empujó a Andreas adentro haciendo que Seth levantara la cabeza de los documentos, sorprendido.

- ¿Rin? - le preguntó y la joven sacó la chamarra descubriendo al guía - Mierda... ¿Lo vieron?

- No lo creo, estaba con él cuando empezó.

- ¿Qué está pasando? - preguntó el joven mirándose en un espejo - Yo no la activé.

- El SICOM - le dijo Rin inquieta - Está desestabilizado, busca a su esper... Son estelas de llamada.

- ¡Pero ni siquiera sé cómo es! - exclamó Andreas frustrado

- Tú no, pero tus estelas si lo reconocen y lo buscan... - aclaró Rin - Debe haber salido de tu rango de alcance.

- ¿Hay alguna manera de romper el SICOM? - preguntó angustiado - Si a mi me afecta así, al esper ¿No debería pasarle lo mismo? ¿Mostrar alguna señal?

- Es el guía quien busca al esper y activa el SICOM. - le recordó Rin - Cómo no sabes quien es y posiblemente no han estado en contacto por tanto tiempo, serás tú el que se desestabilizará primero para desplegar las estelas y buscarlo.... - lo indicó - Justo como lo estás haciendo ahora. Tú esper parece no se consciente del vínculo o tiene una capacidad de control extraordinaria. Sólo he visto un esper que pueda controlar un SICOM y alejarse de su guía sin síntomas.

- Wen... - murmuró Seth

- Así es..., pero casi le costó la vida a su guía. - le recordó Rin.

- ¿Me pueden decir quien es Wen, por favor? ¿Podemos hablar con ella o preguntarle a su guía que mierda puedo hacer con esto? - pidió Andreas asustado.

Seth lo miró y suspiró.

- Prometí no molestarlos por esta misión... - le dijo inquieto.

- Si no me explican cómo controlar esto no podré trabajar y tú mismo me patearás el trasero. - exclamó el guía - Necesitamos encontrar a ese maldito esper y cortar este SICOM.

- Tengo entendido que no puedes rechazar el SICOM. - dijo Rin - Debes lograr que el esper se convierta en fénix o seguirán vinculados a menos...

- A menos ¿Qué? - preguntó Andreas.

- A menos que uno de los dos muera... - terminó Seth activando su brazalete - Selene...comunícame con Anthea.

- Estableciendo conexión....