EGIPTO, ALEJANDRÍA (PROVINCIA ROMANA) —¡Siguiente! —gritó el centurión haciendo que un hombre de los que había en la fila caminara unos pasos y les mostrara sus documentos que le acreditaran como ciudadano romano—. Di tu nombre completo. —Publius Casius Nason—respondió. —¿Alguna vez has estado en una legión? —No, señor, es mi primera vez. —¿Qué actividad desempeñas? —Soy herrero. Eso hizo sonreír al centurión que había sido nombrado por la mano derecha de Heráclito para llevar a cabo el reclutamiento. En el ejército romano, los panaderos, alfareros, herreros y médicos, eran sumamente valorados debido a la destreza y a las actividades que podían desempeñar en los campamentos. —Sabes las normas. No esposas, ni hijos y lealtad completa a Roma. —Estoy al tanto mi señor. —Como eres h

