Capitulo 43. Daemon suspira incomodo mientras ella lo lleva arrastras por el parque. — Vamos Daemon, vamos a divertirnos.— Ella se toma fotos con él, es su oportunidad de tomarse fotos. —Fabián, romanos una fotografía. Daemon la abraza un poco inquieto y Fabián captura una hermosa fotografía. — ¿Ya?— Pregunta alejándose un poco. — Si señor. — Bien, vamos. Fabián nos vemos más tarde. Fabián sonríe al verlo seguirla, ella lo hace hacer cosas que él no se atreve hacer por su cuenta, jamás habían venido a un lugar así, ni siquiera con la señora, ella amaba el silencio, la lectura y el hogar, a Daemon le gusta salir pero a lugar más, ¿Cómo le dice? De adultos, estos lugares no le atraen, o no lo hacía hasta que ella llegó. — Dispara, Daemon, quiero ese peluche, por favor, por fa

